El alcalde de Catoira, Alberto García, asegura que "siempre tuve en mente hacer pública la declaración de bienes, aunque es de esas cosas que vas dejando para más adelante". De todos modos, sí hizo algo parecido cuando accedió a la Alcaldía, hace dos décadas. Entonces mandó una carta a todos los domicilios del municipio, indicándoles sus bienes. "Y haré lo mismo cuando me vaya".
Es más, no tiene inconveniente en apuntar públicamente que posee la mitad de una casa, otro inmueble que le dejó en herencia su padre, y un coche. Dice que apenas tiene dinero ahorrado y que está pendiente de pagar la hipoteca.
Todos los regidores consultados ayer por este periódico aseguran que no tendrían inconveniente alguno en desvelar públicamente su patrimonio, como ya han hecho los miembros de la Diputación o la Xunta de Galicia, aunque asimismo nadie tiene previsto hacerlo por iniciativa propia a corto o medio plazo.
En este sentido, por ejemplo, Gonzalo Durán opina que la iniciativa podría salir de las federaciones de municipios, ya sea la estatal (Femp) o la gallega (Fegamp). "Si nos viene el mandato de arriba yo no pierdo ni un minuto en eso. Presento mi declaración y ya está", aseveró el alcalde de Vilanova y presidente comarcal. Además, Gonzalo Durán recuerda que los datos de estas declaraciones pueden extraerse de los registros de la propiedad.
Las declaraciones que se realizan ante el secretario del ayuntamiento afectan a todos los corporativos, tanto a los del grupo de gobierno como a los de la oposición, que las custodia hasta la finalización del mandato o el cese de la actividad política del concejal.
