Los armadores rechazan en referéndum el traslado del puerto pesquero de O Corgo

En cualquier caso, había 120 armadores llamados a las urnas y solo participaron 40, de los que 25 votaron para quedarse en O Corgo y 14 respaldaron el traslado a Con das Señoritas.

Esta escasa participación hace creer que la decisión tomada ayer en las urnas, por muy democrática que resulte, no tendrá carácter vinculante.

Hay que tener presente que casi todos los grupos políticos de la corporación –al menos los tres del gobierno y el mayoritario en la oposición, el PP–, los colectivos empresariales más representativos –como Emgrobes, CIT y Hostelería–, clubes deportivos, asociaciones de embarcaciones tradicionales y, en general, absolutamente todos los colectivos mecos se posicionaron a favor de trasladar el puerto pesquero a Con da Señoritas para así instalar el puerto deportivo en O Corgo y situarlo así dentro del centro urbano, pues se cree que "sería un importante refuerzo para el comercio local y un salto de calidad en la promoción turística de O Grove".

En el gobierno tripartito incidían ayer en ello y destacaban que "la postura de este gobierno, de la mayoría de la corporación y de la sociedad grovense está clara, y no vamos a permitir que la postura de 25 personas se imponga a la inmensa mayoría".

Por este motivo, el ejecutivo que preside el socialista José Cacabelos sigue adelante con sus planes, como parece que van a seguir otros grupos políticos, como el PP, e incluso Portos de Galicia, el ente público que debe ocuparse de la construcción del puerto deportivo, si es que finalmente se construye, y que tiene la última palabra.

Todos los informes en poder de Portos sitúan a O Corgo como primera y más importante opción para el puerto deportivo, y esa parece que va a ser la decisión final, a expensas de lo que suceda en la reunión que está previsto celebrar el jueves en O Grove con participación del presidente de Portos y los representantes políticos, sociales y empresariales de la localidad.

El patrón mayor, Francisco Iglesias, insistió ayer en que su preferencia es trasladar el puerto pesquero, "ya que esto supondría construir unas instalaciones a nuestra medida, con todos los servicios que necesitemos y demandemos". En cualquier caso, después de lo ocurrido ayer, su intención es "trasladar a Portos el resultado de la votación y que la Xunta actúe como crea conveniente".

El propio Francisco Iglesias reconoce que la decisión tomada en referéndum parece poco trascendente, ya que "absolutamente todos los demás apoyamos la opción del traslado de las instalaciones pesqueras a la parte posterior de la lonja, donde insisto en que podríamos conseguir una infraestructura mucho mejor que la actual".

Tanto él como varios miembros del gobierno tripartito recuerdan que el jueves se celebró una reunión en la que "todos los colectivos participantes y los grupos políticos coincidimos en una postura unánime, como es la de pedir que el puerto deportivo se habilite en O Corgo".

En el PP prefieren no entrar a valorar "enfrentamientos estériles que no conducen a ninguna parte", pero recalcan que "la construcción del puerto deportivo es una prioridad, y ya lo era cuando gobernamos entre los años 1999 y 2007, pero entonces no nos dejaron seguir adelante con nuestros proyectos". Añaden que "el PP está trabajando de nuevo para conseguir esta importante instalación".

Para terminar, decir que los armadores críticos con el patrón mayor, que son prácticamente los mismos que se oponen al traslado del puerto pesquero, se mostraban ayer radiantes con el resultado del referéndum. "Es la prueba de que nuestro patrón perdió todo protagonismo y ya nadie se fía de él, pues estamos cansados de tanta manipulación", explicaban.

A su juicio, lo más importante de la votación de ayer es que "el patrón no pudo imponer su ley, que fue la que impuso cuando rechazó el puerto deportivo que quería construir el PP en Con das Señoritas, cuando la cofradía decía que era un importante banco marisquero, y donde ahora el patrón quiere construir el pesquero".