El pleno del Congreso de los Diputados admitió ayer a trámite la modificación de la Ley de Puertos del Estado para que figuren en gallego los topónimos de las capitanías marítimas y de los distritos marítimos de Galicia. La propuesta fue aprobada por unanimidad, algo que ya ocurrió en el Parlamento de Galicia cuando esta se debatió, y ahora se va a tramitar por el procedimiento de urgencia.

Los representantes de los grupos políticos que acordaron la propuesta en la Cámara autonómica, PPdeG, PSdeG y BNG, manifestaron su acuerdo, al igual que los diputados nacionales de cada uno de estos partidos. El cambio más significativo que va a suponer la aprobación definitiva de esta normativa se hará visible en las propias embarcaciones de la provincia marítima de Vilagarcía. En la actualidad todos ellos lucen un VILL en sus folios, con el que son identificados, el cual pasará a ser sustituido por VIL, en alusión a Vilagarcía una vez se encuentre aprobada de forma definitiva la propuesta que se analizó ayer en el Congreso.

La reclamación viene realizándose desde hace años ya que la matrícula no podía identificarse con el nombre oficial de la provincia marítima, que no es otro que Vilagarcía, forma en gallego y la única que reconoce la Ley de Normalización Lingüística

Esta Ley ha sido fijada como el marco al que se van a acoger estos cambios, y de este modo, los topónimos oficiales de las capitanías marítimas, los distritos y los accidentes geográficos que los limitan situados en Galicia se identificarán en la lengua de Rosalía de Castro.

En representación del Parlamento gallego, el diputado del BNG Bieito Lobeira denunció que se haya impuesto la toponimia en castellano por un intento, hace años, de "extirpar las señas de identidad de Galicia como pueblo diferenciado". No dudó en reclamar respeto, libertad y derechos democráticos para proceder a esta modificación por la que esta formación lleva años esperando.

En el mismo sentido se expresó el diputado de la misma formación Francisco Jorquera, para el que son necesarios hechos que demuestren la apuesta por un Estado plural, "no sólo buenas palabras".

Por parte del PSdeG, Francisco Cerviño abogó por preservar la salud del gallego, pues "el pueblo gallego es su lengua", algo que respaldó la también socialista Margarita Pérez Herráiz, que recordó que la única modificación pendiente, en estos momentos, es "la de los folios de matriculación en lo que respecta a Vilagarcía de Arousa", manteniendo que "la determinación de los topónimos es competencia de la autonomía gallega, y esta ha establecido que los nombres geográficos oficiales son en esa lengua, postura que avala el PSOE".

El Partido Popular, a través de Agustín Bahamonde, primero, y de María del Pilar Ramallo, después, han destacado el gallego como "el núcleo de identidad del territorio". Otras formaciones políticas como Esquerra Republicana de Catalunya, Izquierda Unida, ICV, Partido Nacionalista Vasco y Convergencia i Unió apoyaron la propuesta que trasladó el Parlamento Gallego al Congreso.

Junio de 2008

El Parlamento gallego aprobó en junio de 2008, por unanimidad, esta iniciativa para que los nombres oficiales de las capitanías marítimas, puertos y accidentes geográficos respeten la toponimia oficial. La iniciativa, que inicialmente partió del diputado nacionalista Bieito Lobeira, trataba así de evitar la aparición de topónimos deformados como "El Ferrol", "Santa Eugenia de Ribeira", "Isla de la Toja" o "Villagarcía".

En la exposición de motivos de la propuesta se recordaba que la Xunta aprobó en 1984 el procedimiento para la recuperación y fijación de la toponimia de Galicia y posteriormente se aprobaron las nomenclaturas en toda la comunidad.

"Galicia -continúa la propuesta aprobada- tiene competencias exclusivas en la materia, por lo que el cumplimiento de esta normativa es obligado para todas las administraciones".