La dureza de este invierno, en el que se han combinado casi todas las inclemencias meteorológicas posibles, pasará factura al sector del campo. Y es que debido a los graves daños sufridos por muchos agricultores en sus invernaderos, las cosechas se van a retrasar cerca de un mes.

El presidente de la cooperativa de Vilariño Horsal, Alberto Amil, está convencido de que los cultivos de productos como el pimiento o el tomate se van a retrasar este año casi cuatro semanas con respecto al calendario habitual en las explotaciones arrasadas por el Flora.

Alberto Amil estima que, en condiciones normales, el pimiento o el tomate gallegos deberían estar en el mercado a finales de abril o principios de mayo, pero que en este 2010 será difícil que los agricultores afectados puedan vender su mercancía hasta finales de mayo o principios del mes de junio.

El presidente de Horsal indica que esta circunstancia se produce, fundamentalmente, por los terribles daños que sufrieron los invernaderos durante el temporal Flora, que arrasó O Salnés a mediados de enero. Ese vendaval dejó un reguero de invernaderos destrozados por toda la comarca. No sólo les volaron los plásticos, sino que en algunos casos incluso las estructuras de hierros se vinieron abajo.

Los daños económicos fueron considerables, pues en Horsal contabilizaron las pérdidas sufridas por sus socios en 350.000 euros –sólo contando las estructuras, y sin contabilizar los cultivos perdidos–, mientras que en Hortumia cifraron las pérdidas de sus agricultores en unos 120.000 euros.

Alberto Amil entiende que este invierno ha sido pésimo para el sector, y que el Flora ha asestado un duro golpe a las economías de muchos agricultores. Por ello, pide a la Xunta de Galicia que incluya los plásticos en los planes de mejora de los invernaderos, ya que ahora mismo sólo contempla ayudas para las estructuras. El presidente de la principal cooperativa agraria gallega considera que es necesario que en los planes de mejora se incluyan también las inversiones para el arreglo de desperfectos.

"Este ha sido un invierno muy malo, y si nos salva algo es que fue un invierno muy duro en toda España", sentencia el presidente de la cooperativa cambadesa.

Aplazan el arreglo

Algunos invernaderos llevan destrozados desde hace mes y medio, pero sus propietarios prefieren esperar a que llegue el buen tiempo antes de ponerse manos a la obra.

Y es que, como dice Alberto Amil, "este invierno llevamos temporal tras temporal". De hecho, por si el paso del Flora no hubiese sido suficiente, también el Xynthia causó daños. Fueron bastantes menos los afectados, pero también los hubo.