Más de 400 fijos de las empresas metalgráficas asentadas en la comarca de O Salnés iniciaron anoche una huelga de 24 horas, convocada por los sindicatos Comisiones Obreras y UGT, en protesta por los reiterados escollos de la patronal para la firma del convenio colectivo que debía haberse firmado el año anterior y que aún no está cerrado.

En esta comarca, que es la segunda en importancia de la provincia de Pontevedra por el número de trabajadores del sector, operan tres plantas fabriles: Mivisa en el polígono industrial de Ribadumia, e Impress con su factoría ubicada en la recta de A Goulla, en Meis, así como su nueva adquisición en Vilagarcía de Arousa, la fábrica hasta hace poco denominada Megasa.

Dado que las plantas fabriles trabajan en turnos las veinticuatro horas y el primero de ellos comienza a las diez de la noche, el paro laboral se inició dos horas antes de las cero horas para hacerlo coincidir con el turno completo, y termina hoy a las diez de la noche.

El sindicato Comisiones Obreras ha señalado que los trabajadores del sector de metalgráficas han decidido unirse a la convocatoria de huelga establecida para el metal ante el bloqueo en que se encuentra también el convenio estatal de metalgráficas, cuyas negociaciones acabaron sin acuerdo a pesar de la mediación del Servicio Interconfederal de Mediación y Arbitraje, SIMA.

Los trabajadores de metalgráficas de las tres factorías de la comarca fueron convocados a una asamblea que se celebró el pasado sábado en el Auditorio Municipal de Vilagarcía. Los sindicalistas de Comisiones Obreras explicaron la situación de parálisis en que se encuentra la negociación del convenio y propusieron al personal que secundara la huelga.

"Dado que una vez más la patronal no presentó ninguna oferta en firme que se pudiera aceptar, sólo la voluntad de seguir negociando, con la sensación de no tener ninguna prisa, los sindicatos decidimos continuar con la convocatoria de huelga anunciada en la última reunión de la mesa negociadora del convenio. La huelga tiene como objetivo poner fin a la postura recesiva, intransigente y premeditada de la patronal en cuanto al salario, la jornada anual o los temas sociales planteados en la plataforma", señalan los sindicalistas de Comisiones.

Se unen así a la huelga convocada en 15 provincias en protesta por el bloqueo de convenios colectivos.