Aún tratándose de episodios totalmente naturales que no entrañan riesgo alguno para la salud pública, si los productos consumidos son adquiridos por los cauces legales, resulta muy llamativa la magnitud que empieza a adquirir la marea roja. Y es que a la presencia de toxinas lipofílicas, entre las que destaca la diarreica (DSP), se suma con virulencia la acción de la toxina amnésica (ASP), que obliga tanto a reforzar el cierre que pesaba ya sobre algunos polígonos bateeiros como a decretar otras prohibiciones de extracción nuevas.

La situación resulta especialmente grave en las rías de Pontevedra y Vigo, manteniéndose a salvo, por ahora, la de Arousa, que es la más productiva de Galicia.

Conviene explicar, y así lo atestiguan los biólogos consultados, que la marea roja es frecuente en cada primavera, y la llegada de la ASP también es habitual al comienzo de esta estación, caracterizándose por ser una variedad de biotoxina que crece y se esparce con gran fuerza y rapidez, casi tanta como la que demuestra cuando empieza a desaparecer, en un proceso mucho más rápido que el de la DSP.

Tanto ahora como llegado el otoño, la toxina ASP alcanza “picos” extremadamente altos que, inevitablemente, obligan a prohibir la extracción de mejillón en las bateas, pero también en bancos de infaunales -las especies que como la almeja o la navaja viven enterradas en sustrato- y en las zonas de extracción de epifaunales o pectínidos, que como la zamburiña, la volandeira o la vieira viven sobre el sustrato.

Dicho esto hay que puntualizar que el Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino (Intecmar) notificó ayer la prohibición de extracción, a causa de la ASP, para la volandeira de las zonas II y III de la ría de Vigo, al igual que se prohibió cautelarmente la extracción de moluscos infaunales en la Zona II de Vigo.

En lo que a moluscos bivalvos cultivados en viveros flotantes se refiere, la ASP obligó ayer a cerrar los polígonos mejilloneros Cangas C, Cangas E, Vigo A, Cangas D y Redondela A, todos ellos en la ría viguesa.

De esta manera, estas aguas tienen cerrados en la actualidad 8 polígonos de bateas de mejillón, manteniéndose sólo 3 abiertos.

La situación también es extrema en la ría de Pontevedra, donde están cerrados los 8 polígonos de bateas de mejillón de que dispone.

A estos cierres hay que añadir los de Muros A y Muros B, situados en la ría Muros-Noia, y el cierre que afecta al Corme B, en todos los casos, cabe insistir, a causa de la ASP y para bateas de mejillón.

En cuanto a las zonas de infaunales, desde Intecmar, con sede en Vilaxoán (Vilagarcía), informan de que están cerradas las ya citadas en Vigo y las zonas IV y V de la ría de Pontevedra, mientras que para los pectínidos, ya sea por DSP o por ASP, se prohibe la extracción en toda Galicia.

La situación actual, en cuanto a temperaturas -tanto la exterior como la del agua-, vientos y otras condiciones meteorológicas, favorece la expansión de la marea roja, por lo que se auguran nuevos cierres en las próximas jornadas.