Las Anpas de los colegios de Carril, A Lomba, Rubiáns, Vilaxoán, O_Piñeiriño, A Escardia, Arealonga y Vagalume firmaron un manifiesto conjunto que en breve remitirán a la Consellería de Presidencia para exigir la puesta en marcha de servicios mínimos de limpieza en los colegios. Los residuos y la suciedad acumulados en algunos centros educativos (especialmente en el colegio carrilexo) han convencido a algunos padres, de modo particular, para no llevar a sus hijos a clase.

Los progenitores exigen que los técnicos sanitarios del Concello acudan hasta los colegios vilagarcianos para comprobar "in situ" las condiciones de higiene en las que se están desarrollando las clases. Algunos recuerdan que "en centros hay niños de tres años de edad por lo que la situación de falta de limpieza provoca preocupación".

Los padres respetan la postura de los trabajadores, pero entienden que se debe buscar una solución. Por ello instan a Educación a que medie en el conflicto para llegar a un acuerdo.

En el encuentro de ayer de todas las Anpas estuvo presente la responsable de Educación del Concello, Susana Camiño, que está intentando mediar en el conflicto para que ninguna parte salga perjudicada.

Protesta

Por su parte, los sindicatos alabaron la firma conjunta del manifiesto por parte de las Anpas y señalaron que para que el conflicto llegue a solucionarse es necesaria la implicación de las distintas administraciones.

Lo cierto es que el medio centenar de trabajadoras de la limpieza que llevan ya una semana en huelga se hicieron notar ayer en el casco urbano vilagarciano. Al filo de las doce del mediodía salían en manifestación desde la calle Castelao y cortaban el tráfico en alguna céntrica calle sin que se produjesen incidentes.

Con sus acciones, los sindicatos intentan presionar a la patronal para que se siente a negociar "de una vez por todas". De momento, desde la empresa se les ha advertido de que las negociaciones no se realizarán mientras que "no se pare la huelga" algo que, ratifican los sindicatos, "no vamos a hacer de ningún modo".

Los sindicatos creen que "lo que pedimos no es nada exagerado" y ratifican que la intención de los representantes es firmar un convenio que permita que "las trabajadoras lleguen a cobrar hasta 1.000 euros al mes dentro de cuatro años".

Esquiroles

Las trabajadoras en huelga señalan además que se van a mostrar inflexibles con "los esquiroles que están limpiando los centros por las noches perjudicándonos a todas". Las movilizaciones se retomarán mañana de modo constante en distintos puntos del casco urbano. La falta de acuerdo, a una semana del inicio de la huelga, hace prever que esta será larga y dura.