Justo seis años después de que el Prestige tiñese de negro la costa gallega, el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, asegura que Galicia es la comunidad autónoma de España que cuenta con más medios para luchar contra accidentes o catástrofes marítimas. El máximo mandatario gallego visitó ayer Vilagarcía en compañía de la conselleira de Pesca, Carmen Gallego, para informar al sector marisquero y pesquero de toda Galicia de que "hoy somos más fuertes que en 2004" y de que, por ello, "estamos preparados". Con treinta minutos de retraso sobre la hora prevista y ante la destacada presencia de políticos de la comarca, el presidente clausuró unas jornadas técnicas celebradas en el Auditorio y en las que se informó al sector marisquero sobre "el cumplimiento de las deudas que Galicia tenía con la ciudadanía y con la gente del mar".

Pérez Touriño puso sobre la mesa el paquete de medidas que, según él, se han puesto en marcha desde la "desfeita". El socialista explicó que desde la gran catástrofe se han aumentado considerablemente los efectivos de emergencia, reduciendo los tiempos de respuesta e incluso dotando a la comunidad autónoma de un equipo de submarinistas especializados disponibles las 24 horas del día y los 365 días del año. Touriño aclaró que los medios no sólo han aumentado en número, sino también en mejor formación y en la calidad de las herramientas e instrumental avanzado que utilizan.

Con nombres concretos, Touriño se refirió a los helicópteros de emergencias con sede en distintos puertos gallegos y apeló al buen funcionamiento de bases logísticas de actuación como la de Ribeira, Corcubión, A_Pobra y, partir del próximo año, también la de Cambados.

Touriño especificó además que la capacidad de los buques adaptados a la recogida de hidrocarburos ha pasado, en seis años, de 80 metros cúbicos en toda España a más de 5.000 tan sólo en Galicia.

Convenios

Entre los argumentos esgrimidos por el presidente destacaron las normativas existentes a nivel europeo en materia de protección marítima. En este sentido, Pérez Touriño calificó como un "logro" la prohibición (aún a partir del año 2010) de que los buques monocasco circulen por las costas de países de la UE.

El máximo mandatario gallego reiteró que, con la normativa en la mano, "no se va a permitir que nadie que dañe el medio ambiente marino quede impune" y señaló que la intención del gobierno autonómico es la de promover todo tipo de gestiones para dotar a Galicia de un buque de la Axencia Europea que actúa en otros puntos de la costa del continente como la Bretaña francesa o el Báltico.

Formación

El presidente de la Xunta recordó además que, tras la catástrofe del Prestige, se hizo evidente "como afecta la globalización a bordo de un buque mercante". En esta línea, señaló que "es fundamental" exigir por parte de las administraciones una correcta formación de la tripulación, con una "dignificación del trabajo a bordo" y con un Plan Integral de Formación Marítima y Pesquera como la que se ha puesto en marcha desde la Xunta hace unos meses y que ya ha posibilitado la formación de más de 1.600 alumnos de toda la comunidad.

A ello se le suman, según el mandatario socialista, grandes cantidades de material y de medios que se han suministrado a los puertos para evitar situaciones como las de 2002.

Voluntarios

Como no podía ser de otra forma, el presidente de la Xunta tuvo también unas palabras para los voluntarios que, durante meses, "peinaron" la costa y las playas gallegas para extirpar el chapapote que lo había cubierto todo. Emilio Pérez Touriño señaló que todos los medios con los que se cuenta actualmente son "lo que les debíamos a la gente que recogió el fuel con sus propias manos" para evitar, como en el caso concreto de la ría de Arousa, que este minase por completo la riqueza marisquera de la misma.

El mandatario socialista resaltó también que la catástrofe del Prestige nos "ha servido" para comprobar la gran capacidad de movilización de las personas y que es por ello que debe servir como "faro" para acciones futuras. Touriño apeló a "confiar en nosotros mismos" y señaló que "todavía nos queda mucho por hacer, pero estamos en el camino correcto". Las palabras del presidente de la Xunta estuvieron avaladas por varios paneles informativos colocados en la sala de juntas del Auditorio en los que se hacía referencia al "antes" y al "ahora" con gráficos claros sobre el incremento sustancial en el número de operativos ubicados a lo largo y ancho de la costa gallega.

Lo cierto es que las tristes imágenes que, durante meses, empañaron las jornadas de miles de marineros en Arousa volvieron a la retina de la mayoría de los presentes ayer en Vilagarcía. Todos aplaudieron la intervención del presidente con la esperanza de que, pese al anunciado incremento de medios, el Prestige no vuelva a repetirse.