La comunidad de montes de Trabanca Sardiñeira, en Carril (Vilagarcía) celebró ayer elecciones a la junta rectora, y se presentaron dos candidaturas. Salió vencedora la que encabezaba el actual presidente de la gestora, José Juan Rodríguez Cubreiro, y que defiende el proyecto de construcción de un gran complejo y turístico deportivo, que incluiría la construcción de un nuevo campo de fútbol, de un centro social y de un centro hípico en los terrenos que ahora ocupa el campo de fútbol.

La asamblea se celebró en medio de una fuerte tensión entre partidarios y detractores del proyecto, y uno de los responsables de la otra candidatura, que lideraban Antonio Veloso y Ramón Rodríguez Suárez, afirmaron que durante la misma se produjeron varias irregularidades.

A la hora de presentar sus valoraciones, José Juan Rodríguez Cubreiro señaló que "se impuso la lógica y el sentido común" y que "estamos trabajando y haciendo un proyecto bueno. Vamos a hacer un monte de sacar el sombrero". En la asamblea de ayer se aprobó también el censo de comuneros, que por ahora forman 106 unidades familiares. En cuanto a la superficie de monte, la comunidad de Trabanca Sardiñeira dispone de 59 hectáreas, y el complejo turístico y deportivo ocuparía unas 10, según el elegido ayer presidente de la junta rectora de la comunidad.

La intención de este equipo directivo es ponerse a trabajar ya en el proyecto para que sea una realidad cuanto antes, y esperan contar para ello con el apoyo económico de las administraciones. Se trata de una iniciativa que ya recibió el respaldo público del Concello de Vilagarcía, y José Juan Rodríguez señaló que en próximas fechas se convocará una nueva asamblea para presentar a los socios esta iniciativa.

Alegó que tal y como ellos lo han concebido, el nuevo campo de fútbol causará un impacto paisajístico mucho menor en la zona. Los detractores, por su parte, afirman que no están en contra del centro hípico, pero opinan que debería hacerse más apartado, ladera arriba. Entienden que en la ubicación elegida ahora causará malos olores e incluso se podría producir la contaminación de las aguas de pozos y manantiales, al estar el centro equino muy próximos a las viviendas.