Diez de los doce "grumires "que, hasta hace unos meses, configuraban la plantilla del servicio de emergencias de Vilagarcía volverán a su puesto de trabajo el próximo martes. Una veintena de interesados acudió ayer a las pruebas de selección y admisión en el Concello con la mirada puesta en una plaza que, al menos a priori, tiene una duración de nueve meses. Al final no hubo sorpresas y Ravella cumplió el compromiso adquirido en su día por la alcaldesa, Dolores García, y por el Pleno de la Corporación en el que se aseguraba que los efectivos con experiencia en Vilagarcía tendrían preferencia respecto a otros llegados de fuera.

Con evidentes muestras de alegría la anterior y ahora renovada plantilla de los grumir reconocía que, al final, "hemos tenido que salir a la calle para recuperar nuestro puesto de trabajo". Hace unos días confiaban ya en que, al menos, el 70% de los efectivos fuesen readmitidos, algo que al final sucedió quedando fuera sólo dos efectivos de los anteriores que no se presentaron a la selección al estar trabajando ya.

Un parche

Lo cierto es que, pese a haber cumplido el acuerdo plenario, la readmisión de los ex grumir no es más que un "parche" a una situación que volverá a explotar en menos de un año. Los efectivos de emergencia confían en que la alcaldesa cumpla lo prometido en su momento que es, nada más y nada menos, que poner a funcionar un Servicio Municipal de Emergencias que, en teoría, le correspondería a Vilagarcía por tener más de 20.000 habitantes.

Los grumir inciden en que "esperamos que se cumpla lo que se dijo y, aunque no haya plazas para todos, que al menos convoquen un concurso público para cinco o seis personas".

Por el momento nada se sabe sobre esto. Las diez personas readmitidas ayer y los dos efectivos nuevos se unirán a los tres (dos contratados y un funcionario) que ya están trabajando. Todos ellos deberán llevar hoy la documentación que se les exige al Concello y será entonces cuando se determinen los turnos y los servicios que realizarán cada uno de los contratados. A día de hoy existe cierto temor acerca del trabajo que desempeñará cada uno de ellos. De hecho, algunos apuntan a que los recién contratados no realizarán servicios de emergencia, sino que se ocuparán de la limpieza tanto de viales como de cunetas.