Llegó el momento de cerrar los libros y demostrar lo aprendido. Plasmar en cuatro folios un duro año de nervios y estudios, un año que, de acabar bien, abrirá para muchos las puertas de la Universidad.

Más de 300 alumnos de las comarcas de O Salnés y Ullán se enfrentan a partir de mañana, en las delegaciones de Pontevedra y Santiago, a los temidos exámenes de Selectividad, pruebas que determinarán la nota -junto a las calificaciones del bachillerato- con la que los estudiantes accederán a las carreras deseadas.

Serán concretamente 316 estudiantes de los institutos de Arousa los que acudan a estas pruebas. En Santiago se examinarán los 25 del Fermín Bouza Brey, los 22 del Cotarelo Valledor y los 31 del Castro Alobre, todos de Vilagarcía. También llegarán a la capital gallega 11 estudiantes del instituto de Valga y 23 del Asorey de Cambados.

En Pontevedra les toca a los 55 de Carril, 49 del Cabanillas de Cambados, 36 del Vilalonga (Sanxenxo), 35 del instituto Monte da Vila en O Grove y 29 del A Basella de Vilanova.

Serán tres días en los que se examinarán de un total de 7 materias (las troncales de Lengua Castellana, Lingua Galega, Inglés e Historia o Filosofía, más las 3 propias de su especialidad). Queda el tiempo justo del último repaso, aunque los expertos aseguran que lo mejor antes del examen es descansar.