Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

Entrevista | Borja Cobeaga y Anna R. Costa Reconocidos guionistas

«Cada vez es más complicado hacer comedia»

Como parte de la programación de los Premios Feroz, que se celebran por segundo año consecutivo en Pontevedra, varios profesionales del sector del cine participan en coloquios en la ciudad. Los guionistas Anna R. Costa y Borja Cobeaga, de «Arde Madrid» y «Ocho apellidos vascos», estuvieron este martes

Anna R. Costa y Borja Cobeaga antes de comenzar su coloquio.

Anna R. Costa y Borja Cobeaga antes de comenzar su coloquio. / Gustavo Santos

Pontevedra

El pasado martes 14 de octubre se realizó una interesante jornada de ponencias con motivo de los Premios Feroz 2026. En estas charlas participaron celebridades como Borja Cobeaga, conocido por su papel de guionista de la película «Ocho apellidos vascos», o Anna R. Costa, ‘showrunner’ de la miniserie «Arde Madrid». Ambos destacan en el género de la comedia y cuentan con el reconocimiento de los Feroz.

—¿Qué destacarían de este tipo de ponencias?

Anna: Yo creo que quizás lo más interesante es cómo las recibe el público.

Borja: Sí, y también de dónde surge la idea, de la observación, de cómo la comedia tiene que ver mucho con cotillear a la gente y observar cómo actúa, que es lo que luego trasladas al papel.

—Hacer comedia no es algo fácil, ¿qué dificultades encuentran hoy en día?

A: Hay que luchar mucho contra la no ingenuidad del espectador, que ya ha visto mucha comedia y ya sabe lo que hay. El espectador tiene muchas ganas de reírse, pero no se va a reír con cualquier tontería. Entonces, es verdad que cada vez es más complicado.

B: Sí, es difícil encontrar líneas nuevas de comedia. A veces casi es más interesante quedarte en lo clásico, en un reflejo de una vida cotidiana o el reflejo de un personaje o situaciones muy habituales. Sacarle un poco de punta a cosas donde tú como persona te puedas identificar y reírte de ti mismo puede ser más interesante que irte por las ramas a buscar algo muy sofisticado.

—¿Siempre han tenido claro que se querían dedicar a esto?

B: Sí, yo la verdad es que desde muy pequeñito quería ser director de cine y hacía cortos y cosas así. Lo que no tenía tan claro es la comedia, que me vino después, cuando vi que se me daba mejor que otros géneros y que era algo casi orgásmico pensar un chiste en tu casa y que luego un desconocido se riese. Eso me parece lo máximo que hay.

—¿Cómo se recibe cada nominación y reconocimiento de los Premios Feroz?

A: Las veces que he estado nominada las he recibido con mucha alegría porque han puesto el foco ahí, en ese trabajo de tantos que hay. Entonces yo creo que es importantísimo, no solo para mí y la serie y todos los que la han hecho, sino también para el espectador, que ya lo va a ver de otra manera. Es poner el foco en algo como el prestigio o la calidad, por lo que las comedias que se colocan ahí ya tienen un extra de prensa, una garantía. Entonces, las nominaciones no son una tontería, son importantísimas para los proyectos.

B: Comedias hay muchas, con lo cual destacar cada vez se hace más complicado, pero es verdad que hay algunas que están hechas con más originalidad, más intención, más perspicacia y más carácter también. Normalmente las comedias se llevan menos premios, pero está bien que haya en estos premios en particular una diferenciación, porque al final estás valorando cierta autoría o, lo que decía, cierto empuje. Para los que hacemos comedias tenemos una especie de ilusión, porque sabemos que es donde más o menos nos puede caer algo.

—¿De qué trabajo se sienten más orgullosos?

A: Seguramente «Arde Madrid» es el más redondo, pero yo tengo trabajos en teatro de los que estoy orgullosísima, con los que creo que he podido ir de una escala de comedia hilarante a tragedia en una misma sala, eso me gusta mucho. No sé si lo he conseguido todavía en audiovisual, creo que no. Admiro a Berlanga, Azcona, que son los grandísimos, que dices ¿cómo es posible que una situación tan miserable y tan terrible sea tan graciosa? Eso para mí es la maestría y creo que en teatro me he acercado ahí, pero en audiovisual todavía no y es un reto.

—¿Qué consejo le darían a las futuras generaciones que os tienen como referentes?

B: Básicamente que escriban. Tenía un amigo que decía que siempre tenías que escribir, no sé si eran mil o diez mil páginas de mierda antes de algo que estuviese más o menos bien. Hay que intentarlo, recuerdo cuando era chaval y venía siempre algún director o directora a hablar a clase y desanimaban muchísimo y me daba mucha rabia. Yo siempre he querido hacer todo lo contrario.

A: Totalmente. Yo creo que hay que escribir muchísimo y sobre todo observar la realidad. La observación directa es muy interesante para la comedia porque en lo más pequeño muchas veces está lo gracioso. Hay que ser un buen lector de la vida, hay que tener cierta mirada cómica sobre las cosas que ocurren y también una mirada microscópica de la comedia, porque a veces ocurren cosas y no todo el mundo lo encuentra gracioso. Entonces, para escribir ocurre eso, tienes que ver antes para saber que eso es gracioso o no y luego trasladarlo al papel o levantarlo en película o serie.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents