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Un timbrazo por la integración

Amencer-Aspace celebra el Día Mundial de la Parálisis Cerebral con una «timbrada» popular en A Peregrina

El acto reivindicativo de Amencer-Aspace tuvo lugar en A Peregrina.

El acto reivindicativo de Amencer-Aspace tuvo lugar en A Peregrina. / RAFA VÁZQUEZ

Pontevedra

La Praza da Peregrina de Pontevedra fue el lugar de encuentro de personas con parálisis cerebral y otras discapacidades, sus familias y profesionales del cuidado desde el que se exigió una estrategia estatal que garantice la igualdad y servicios especializados para grandes dependientes.

La cita fue organizada por Amencer-Aspace con motivo del Día Mundial de la Parálisis Cerebral y se enmarcó en la campaña nacional #YaToca, con la cual se denunció que la falta de recursos y la fragmentación de servicios afectan al 80% de las personas con parálisis cerebral, que necesitan apoyo continuo durante las 24 horas del día los 365 días del año.

Para llamar la atención, e invitó a toda la ciudadanía a participar en una «timbrada» popular, usando las bocinas de bicicletas, sillas de ruedas, etc...

«Hablamos de grandes necesidades de apoyo. De realidades que no pueden esperar. De personas que quieren vivir con dignidad, tomar decisiones, tener relaciones, aprender, trabajar, envejecer con calidad de vida. Y para eso, necesitan apoyos personalizados, especializados, estables y continuados que las acompañen en cada etapa vital, desde la infancia hasta la vejez», afirma el manifiesto elaborado para esta campaña, que añade que «la personalización de apoyos no es un extra, es un derecho básico». «Porque las necesidades de cada persona deben estar en el centro para hacer de ellas un traje a medida a lo largo de todo el ciclo vital. Solo así construiremos una sociedad en la que todas las personas puedan participar en igualdad de condiciones».

Se utilizaron timbres tradicionales para llamar la atención. | R. V.

Se utilizaron timbres tradicionales para llamar la atención. | R. V.

El texto visibiliza que «las familias siguen soportando solas demasiadas cargas, que los servicios son insuficientes, desiguales según el territorio, y muchas veces no están adaptados a quienes más lo necesitan. La atención temprana llega tarde o se interrumpe demasiado pronto. La vida independiente se ve limitada por la falta de asistencia personal. Y no hay suficientes plazas ni recursos adaptados para quienes ya muestran signos de envejecimiento prematuros sin contar con apoyos adecuados».

En este sentido, se denuncia que el impacto económico que asumen estas familias puede rozar los 900 euros semanales. «Esta situación obliga, en muchos casos, a que uno de los progenitores —habitualmente la madre— reduzca su jornada o deje su empleo para asumir los cuidados, perpetuando desigualdades de género y afectando al bienestar de todo el núcleo familiar».

Asimismo, recuerdan que las mujeres con parálisis cerebral se enfrentan a una doble discriminación por razón de género y discapacidad, «lo que las expone a un riesgo mayor de sufrir violencia».

Por todo ello, se reclamó una coordinación sociosanitaria real y efectiva, «que asegure una atención integral, continua y centrada en la persona». «No puede haber barreras entre sistema cuando lo que está en juego es la salud, la autonomía y la participación de miles de personas. No valen respuestas genéricas. Ya toca dar una respuesta colectiva».

Al acto acudieron representantes de diferentes instituciones: Anabel Gulías, concelleira de Benestar Social de Pontevedra; Paula Bouzós, diputada provincial de Igualdade e Benestar Social, y Ramón Pereiro, en representación de la delegación territorial de la Xunta en Pontevedra.

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