«Hay que recuperar la vinculación de Valle-Inclán con Pontevedra»

La Asociación de Amigos de Valle-Inclán «surgió casi por un cabreo, por un prurito de intentar decir la verdad», resume Álvaro Lago, uno de los que se congratula porque, después de 13 años, el colectivo cultural vuelve a la Boa Vila para conmemorar su 25 aniversario y el de su revista, Cuadrante.

Álvaro Lago, jefe de redacción de la revista Cuadrante.

Álvaro Lago, jefe de redacción de la revista Cuadrante. / FdV

El Museo de Pontevedra será escenario el próximo día 6 de la presentación de los números 48 y 49 de la revista Cuadrante, un acto que también festeja el 25 aniversario de la Asociación de Amigos de Valle-Inclán y en el que intervendrán su presidente, José María Paz Gago, y los jefes de redacción de la publicación, Pablo Landín y Álvaro Lago.

¿Cómo surgió la Asociación Valle Inclán?

Ana María Matute decía que sus novelas surgían de un cabreo y la Asociación de Amigos de Valle-Inclán surgió casi por un cabreo, por un prurito de intentar decir la verdad. En aquel momento, en 1999, se estaban esparciendo una serie de falsedades sobre el origen, el nacimiento, de don Ramón María. Y hubo incluso quien decía que tenía un documento que probaba que había nacido al otro lado de la ría. Se reunieron un grupo de amigos, ex alumnos e intelectuales y quisieron poner las cosas en claro.

Lo primero fue determinar el nacimiento

Empezaron a bucear en archivos, a buscar la verdad, hasta que Gonzalo Allegue, que estaba trabajando sobre la relación epistolar de Valle Bermúdez, padre de Valle-Inclán, y Manuel Murguía, encontró un documento en el que Valle Bermúdez contaba que no le había escrito en unos días porque había tenido que ir a Vilanova porque había nacido su hijo. Blanco y en botella.

En paralelo a la asociación se puso en marcha la revista Cuadrante, que constituye un hito

¡Y tanto! Piense usted en una revista que lleva en estos momentos 50 números, porque hubo un número 0 y ahora presentamos el 49, sobre un único artista creo que no solo es infrecuente, sino que en estos momentos no conozco ninguna otra que haya tenido ese medio centenar de números dedicados a un solo artista. Y goza de muy buena salud, muy buena.

Reúne a los mejores valleinclanistas

Por lo menos los que hay son francamente buenos. Siempre le puede quedar a uno alguna espina por unos que hayan muerto u otra razón. No quiero decir nombres porque si me refiero a unos me voy a olvidar de otros, pero sin duda están los principales valleinclanistas, las principales cabezas que han trabajado sobre Valle-Inclán. Pero no solo sobre él, sino sobre el entorno de Valle-Inclán, porque cuando estudiamos a un autor no solo importa quién es ese autor sino contextualizar su biografía, el entorno que lo rodeaba y todas estas cosas que a veces a algunas personas se les olvida, pero aquí se ha trabajado y se sigue trabajando absolutamente con todo lo que tenga que ver con Valle-Inclán.

«Uno de los problemas que tiene es que Valle-Inclán es una creación de Ramón José Valle Peña»

Los autores han hecho importantes descubrimientos sobre el autor que no es fácil de investigar.

El primer descubrimiento es datar de manera incuestionable, fechar y situar el nacimiento de Ramón del Valle-Inclán. Uno de los muchos que tiene Valle-Inclán -el primero es que no escribía para mayorías aunque fue un autor de éxito, para algunas personas puede resultar complicado aunque se lee con mucha facilidad- es que Valle-Inclán es una creación de Ramón José Valle Peña. Ahí empieza la ceremonia de la confusión para quien no tiene la suficiente cabecita.

¿Se ha ahondado lo suficiente en la relación de Valle-Inclán con Pontevedra?

No, definitivamente no, en general hay que recuperar la vinculación de Valle-Inclán con Pontevedra. Lo que se ha hecho no está nada mal ni mucho menos pero queda mucho camino por andar, de la misma manera que en literatura queda mucho camino por recorrer con Valle-Inclán. Ciñéndonos a Pontevedra: Valle-Inclán vivió aquí, los que vivimos en Pontevedra sabemos que aquí vivió Valle-Inclán e incluso vivió el vecino de Valle-Inclán (sonríe). Sabemos que aquí hizo el Bachillerato, que aquí publicó su primer libro, y es casi moneda común hablar de las tertulias a las que acudía. Pero por ejemplo su relación con Said Armesto, que fue uno de sus primeros críticos, no está estudiada del todo.

Asegura que tampoco se ha profundizado en su relación en la Boa Vila con la teosofía...

Hay muy buenos trabajos sobre Valle-Inclán y la teosofía pero Valle-Inclán no abandona Pontevedra en 1892 y no vuelve jamás, no, mantiene relaciones con mucha gente de Pontevedra, entre otros Pintos Fonseca, uno de los conocidos teósofos pontevedreses, y esa relación siguió durante toda la vida del autor. Creo que sobre esos apuntes hay que ahondar, por una parte. Y por otra piénsese que se habla de Valle-Inclán dramaturgo porque Luces de bohemia no se la salta en un torero, es una de las grandes obras de la historia de la literatura. Pero es que en prosa no podemos olvidar que El ruedo ibérico y Tirano Banderas son de las dos mejores novelas de la historia de la literatura. Y se que hablo con pasión porque soy valleinclanistas pero creo que hay datos, todo lo objetivos que pueden ser, y que abrió una serie de caminos que no siempre se han seguido.

Sorprende su plena actualidad

Piense que hoy en día ha habido una función de Luces de bohemia en el Nacional en Madrid que agotó todas las entradas y de hecho van a tener que prorrogar temporada porque Valle-Inclán, y se que es una cursilada decirlo y lo lamento, pero tiene plena vigencia.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents