La familia Filgueira recurre la sentencia de las Galerías Oliva

El recurso se basa en el uso continuado por comerciantes y clientes de la entrada cerrada en Gutiérrez Mellado

La entrada anulada a las Galerías Oliva desde la calle Gutiérrez Mellado.

La entrada anulada a las Galerías Oliva desde la calle Gutiérrez Mellado. / RAFA VAZQUEZ

La familia demandante en el caso judicial por el cierre de la entrada a las Galerías Oliva desde la calle Gutiérrez Mellado presentó ayer viernes un recurso a la sentencia desfavorable dictada el pasado 9 de diciembre. Se basa en la «prueba abrumadora» del uso continuado de ese acceso tanto por comerciantes como por clientes históricamente a lo largo de los años.

Así lo ha podido saber FARO a través del abogado de Astrid Filgueira Álvarez, la demandante en este asunto y propietaria del 50% de la zona de las galerías con acceso desde la Oliva que todavía sigue abierta al público.

El letrado, Faustino Javier Seoane Sánchez, destaca que también se ha tenido en cuenta en el recurso «el hecho de haberse cerrado la entrada de una forma realmente sorpresiva y hasta induciendo a error sobre el mantenimiento de la misma». Razonamiento este último en el que se exime del pago de costas, ya que la propia decisión generaba muchas dudas de hecho y Derecho al magistrado.

El juicio se celebró el pasado 27 de noviembre en el juzgado número 1 de Pontevedra, dictando sentencia el juez Julio César Díaz Casales, que alegó que al desaparecer físicamente el edificio en cuestión por el que se daba ese paso, se pierde de forma definitiva ese acceso también.

Todo empezó con el derribo

Hay que recordar que el conflicto se remonta a la demolición a finales de 2022 del inmueble, en cuyos bajos se encontraban una serie de locales de las Galerías Oliva propiedad de los hermanos Corbal. Estos, tomaron la decisión a raíz de un proyecto inmobiliario que tendría como fin el desembarco de Zara en esta zona de la ciudad. La idea de Inditex era crear una gran tienda en la esquina con la calle Michelena. Para ello, era necesario llevar a cabo obras importantes que incluían, inicialmente, el derribo de dos edificios. Uno era el que ya desapareció, ese que daba paso a las galerías, y el otro sigue en pie, y así seguirá, ya que está afectado por el perímetro de protección BIC (bien de interés cultural) del santuario de A Peregrina.

La cuestión es que desde entonces se eliminó el acceso desde Gutiérrez Mellado, provocando malestar de comerciantes y clientes que lo utilizaban. Cuando Astrid Filgueira Álvarez fue consciente de que era un cierre definitivo decidió presentar la demanda. El juicio fue aplazado dos veces, pero finalmente se celebró en noviembre. Esta primera sentencia no le ha sido favorable y cabía presentar recurso de apelación.

Se planteó la opción de un acceso por la futura tienda de Zara

Durante las negociaciones con las partes implicadas para que el proyecto de Zara saliese adelante se llegó a proponer la opción de desviar el acceso de Gutiérrez Mellado a Michelena, de modo que los clientes podrían entrar a las Galerías Oliva a través de la tienda de Inditex.

Sin embargo, esta opción no convenció, ya que estaría supeditada al horario de este establecimiento y, además, durante un período de años en concreto.

En este litigio, Astrid Filgueira Álvarez cuenta con el apoyo de la Asociación de Comerciantes de Galerías Oliva, que desde que se cerró la entrada han advertido del cierre de negocios en este centro comercial cubierto, como así ha ocurrido. Muchos de los comerciantes, así como clientes y vecinos, testificaron en el juicio del pasado 27 de noviembre.

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