Un conductor "cargado" de alcohol al volante a las dos de la tarde y empotrado contra una farola. Es lo que se encontró una patrulla de la Policía Local el pasado miércoles en la Rúa Pedro Soto Couselo de Campelo.
El hombre no parecía estar, a esas horas, en condiciones de coger el coche, pero sí decidió hacerlo y acabo chocando con una farola. Sufrió una salida de vía y acabó derribando el punto de luz.
En la prueba de alcoholemia realizada por los agentes, el conductor "reventó" el medidor: en los dos test realizados arrojó un resultado de 1,64 y 1,58 Mlgr/l en aire espirado. Es decir, superaba en más de seis veces el límite legal, una de las tasas más altas detectadas por la Policía Local de Poio.
Los hechos son constitutivos de un delito contra la seguridad vial y las diligencias serán trasladadas al juzgado de guarda para la celebración de un juicio rápido. También se reclamarán los daños en la farola.
