El hombre de 22 años detenido el domingo por agentes de la Guardia Civil de Pontevedra como supuesto autor de un disparo en una oreja a otro joven, de 19 años, ha sido condenado este lunes por maltrato habitual a su expareja, según informa el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.

Las mismas fuentes indican que el individuo pasó a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Pontevedra, en funciones de guardia, pero no por el disparo, sino por delitos del ámbito de la violencia de género del que fue denunciado el mismo domingo por su exnovia.

El TSXG dice que por esos hechos el juzgado decretó su puesta en libertad tras dictar una sentencia de conformidad. En ella, lo ha condenado, como autor de un delito de maltrato habitual, tres delitos de maltrato de obra y un delito de coacciones en el ámbito de la violencia de género, a 14 meses de prisión (pena que queda suspendida por un plazo de tres años), a 88 días de trabajos en beneficio de la comunidad, a 56 meses de privación del derecho a la tenencia y porte de armas y a 33 meses de prohibición de aproximarse y comunicarse con la víctima

En el caso del disparo, se le atribuye un delito de lesiones a un compañero de piso de ella, al que presuntamente disparó con una pistola de aire comprimido.

Según informaron fuentes de la investigación, el detenido acudió al domicilio de su exnovia en A Caeira, en el municipio de Poio. En ese momento la chica estaba acompañada de otro joven de 19 años al que su exnovio disparó.

La víctima y su amiga salieron huyendo hacia el puente de A Barca y allí se encontraron con un operativo de la Policía Local montado con motivo del paso de la Volta Ciclista a Galicia, a cuyos agentes informaron del suceso. El proyectil le perforó una oreja por lo que tuvo el joven tuvo que recibir asistencia médica.

El supuesto agresor escapó del lugar de los hechos, ocurridos en torno a las diez de la mañana, por lo que se inició un amplio dispositivo de búsqueda que finalizó con la detención de este individuo por parte de la Guardia Civil unas horas después.

Desde el Instituto Armado informaron que la expareja del ahora detenido presentó denuncia en la Comandancia por malos tratos habituales y que el otro inquilino del piso lo hizo por lesiones.

Cuando la víctima acudió a los agentes de la Policía Local, en el nudo de A Barca, presentaba parte de sus ropas ensangrentadas y los funcionarios pudieron comprobar que tenía un agujero en la oreja producto del disparo, por lo que se solicitó la inmediata presencia de una ambulancia. Aseguró que el agresor accedió al inmueble de A Caeira e hizo fuego con una pistola de aire comprimido “sin mediar palabra”.