Semanas intensas las que se viven en los servicios de Urgencias del área sanitaria de Pontevedra, donde acusan la falta de médicos en los centros de salud de Atención Primaria durante la época estival.
Tal y como ha podido saber FARO, en el Hospital Montecelo, el de referencia de la comarca, están atendiendo a una media de 200 personas al día, “la mayoría turistas o simples revisiones”. Esto genera una saturación del servicio, que tiene que ocuparse de atenciones de casos leves, en lugar de los que por protocolo le corresponden: las urgencias.
“Muchas de las personas que llegan lo hacen con revisiones, por ejemplo de heridas, y a los que los desvían a Urgencias para que les vean la evolución”, explican trabajadores de este servicio hospitalario. Es el caso, por ejemplo, de pacientes de Traumatología, que acuden tras sufrir caídas porque son desviados directamente por los profesionales.
De este modo, la cifra de pacientes atendidos cada día se mueve entre los 190 y los 200. El pasado miércoles fueron 219, todo un récord: 84 en el turno de mañana, 98 en el de tarde y 37 en el de noche. La jornada anterior, la del martes, fueron 196: 76 de mañana, 80 de tarde y 40 de noche.
Son números en los días de semana, laborables, porque los fines de semana bajan a 160 o 170.
Afortunadamente, en este servicio de Urgencias hospitalarias cuentan con “el cien por cien de la plantilla cubierto” y todos los refuerzos solicitados son concedidos desde la gerencia del área sanitaria, “incluso contratándose algún día por horas” a profesionales.
“Muchas de las personas que llegan lo hacen con revisiones, por ejemplo de heridas, y a los que los desvían a Urgencias para que les vean la evolución”
De igual modo, en las Urgencias extrahospitalarias, las de los puntos de atención continuada (PAC), el verano está siendo bastante intenso. “Hace mucho calor y la gente está viniendo de forma muy masificada, suponemos que porque faltan muchos profesionales en los centros de salud, así que tenemos trabajo para dar y regalar”, afirman trabajadores del PAC de A Parda, donde en principio también se están cumpliendo los turnos y efectuando refuerzos.
Además de las patologías de carácter leves que estos días se atienden con frecuencia en estos servicios, los profesionales sanitarios confirman que se están dando también numerosos casos de gastroenteritis y coronavirus.
Sobre estos últimos, la Consellería de Sanidade informa de que son 177 los positivos COVID en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés, de los cuales 20 se encuentran hospitalizados.
Precisamente, hay que recordar que sobre la hospitalización que el área sanitaria mantiene cerradas más de un centenar de camas por la reorganización habitual de esta época del año: son cerca de 100 en la zona de Pontevedra, el CHOP, y 24 en la de O Salnés, o lo que es lo mismo, un 11% del total de plazas.
En todo caso, existe un plan de contingencia específico en el caso de que se precise la utilización de un número de camas mayor al previsto. Es decir, que al igual que el del pasado 2022, el área sanitaria mantendrá durante el próximo verano de 2023 la disponibilidad del 100% de las camas en sus respectivos hospitales “para dar respuesta asistencial a cualquier necesidad”, según la gerencia.
En Cotobade: “Por un flemón me mandan a Montecelo”
La falta de médicos en los centros de salud de las localidades del rural está siendo lo más destacado estos días en el área sanitaria. Es el caso de Cerdedo-Cotobade, donde una vecina fue instada a dirigirse a Urgencias de Montecelo por un flemón en la boca. “Me envían a Urgencias porque no hay médicos desde el 1 de agosto. Y yo solo quiero que me receten un antibiótico, no ir hasta Montecelo a molestar, que ya estarán hasta arriba”, explica a FARO la paciente. “Parece que los tres ambulatorios están de adorno, porque ni hay médicos ni hay pediatras. Por poner un ejemplo, no hay nadie ni para dar el sintrom”, afirma. Esta situación también fue denunciada al iniciarse el mes de agosto por los socialistas de Cerdedo-Cotobade, que lamentan “el desmantelamiento progresivo de la sanidad pública en el concello eliminando los servicios de matrona y pediatría en los centros médicos y no cubriendo las ausencias de los facultativos ”.