Carmela Silva se despide tras "un trabajo extraordinario, que espero que no se pierda”

“Para nada esperaba este resultado, lo digo con toda claridad”, asegura la socialista tras perder la Diputación de Pontevedra

Carmela Silva, esta mañana en rueda de prensa.

Carmela Silva, esta mañana en rueda de prensa. / Gustavo Santos

Carmela Silva se despidió esta mañana de la presidencia de la Diputación de Pontevedra asegurando que “para nada me esperaba este resultado”. La socialista dio una rueda de prensa en la que dio a conocer los motivos por los que el gobierno provincial, tras las elecciones municipales de ayer 28 de mayo, vuelve al Partido Popular después de ocho años de gobierno conjunto de PSdeG y BNG, pero también aprovechó para agradecer el trabajo de ambas formaciones, de los trabajadores de esta institución, de su equipo y de la prensa, por la que confesó haberse sentido “muy querida y muy respetada”.

“Quiero mostrar el inmenso orgullo de estos dos mandatos de un gobierno que transformó como nunca a la provincia de Pontevedra y que va a ser un ejemplo de buen hacer, de política con letras mayúsculas. Son los hechos los que hablan”, aseguró.

“Estoy muy serena y muy tranquila y no me voy a emocionar. Fueron ocho años de intensísimo trabajo dándolo todo, trabajando una media de doce horas diarias, que permitieron que la presidenta de Pontevedra pudiera hacer el trabajo que hizo, algo que sería imposible sin el conjunto de gobierno y sin el gabinete”, resumió.

Considera que valió la pena todo ese esfuerzo conjunto para “conseguir que esta Diputación fuese una referencia en movilidad, en igualdad, en medio ambiente, en deporte, en cultura… en cada una de las cosas que pusimos en marcha”.

También dedicó palabras de agradecimiento a todos los alcaldes y alcaldesas de la provincia, “porque juntos y juntas hicimos un trabajo extraordinario, que espero que no se pierda”.

“Quiero mostrar el inmenso orgullo de estos dos mandatos de un gobierno que transformó como nunca a la provincia de Pontevedra y que va a ser un ejemplo de buen hacer"

Utilizó el título de la película “La tormenta perfecta” para analizar los resultados obtenidos en las urnas. Explicó que en la provincia el PSdeG había obtenido 157.368 votos, el 33,94% del total, mientras que el PP consiguió 160.832, un 36,67%, es decir, que entre ambos hubo una diferencia “de tan solo 2,73%”.  “Con el BNG, con 89.394 votos, un 18,13%, ambas formaciones sumamos 52,07%, y sin embargo perdemos la Diputación de Pontevedra, con esa tormenta perfecta que se da en el Baixo Miño con el resultado excelente del PP en Porriño, que nos hizo perder un diputado; con un resultado malo del PSdeG en O Morrazo, que nos hace perder un diputado en el partido judicial de Pontevedra, y con un resultado excelentísimo en el partido judicial de Vigo, donde por la distribución de votos el PP gana un diputado. En total el PP pasa de 11 a 14 diputados”, indicó.

Destacó que en otras diputaciones las diferencias de votos han sido mucho mayores y que sin embargo se mantienen los gobiernos provinciales. Puso los ejemplos de A Coruña, donde la diferencia de votos entre PSdeG y PP ha sido del 10,64% “y sin embargo se mantiene la Diputación” para los socialistas. También de Lugo, con un 15,82% de votos de diferencia.

"Tenemos un resultado tres veces mejor que la media de Galicia, pero el reparto por partidos judiciales hace que este sea el resultado"

“El PSdeG obtiene en la provincia de Pontevedra los mejores resultados de Galicia, con mucha diferencia, y el mayor número de votos. Tenemos un resultado tres veces mejor que la media de Galicia, pero el reparto por partidos judiciales hace que este sea el resultado”, lamentó, recalcando que “no hay ninguna posibilidad, eso está cerrado total y absolutamente”.

Reconoció que “para nada esperaba este resultado, lo digo con toda claridad”. “Estaba absolutamente convencida de que íbamos a tener un extraordinario resultado, de hecho, si nos comparamos con el resto de Galicia así fue”. “Tuve un error de percepción en la provincia en esos lugares”, añadió.

Igualmente, quiso agradecer la confianza de todos los votantes. “Esta es muy última rueda de prensa como presidenta de la Diputación de Pontevedra. Vamos a hacer un traspaso de poderes con el PP y a dejar el gobierno con mucho orgullo de todo lo hecho. Creo que era imposible hacerlo mejor. Fue un privilegio ser la presidenta de la Diputación de Pontevedra. Esta provincia es un paraíso que tenemos que cuidar y nosotros trabajaremos donde la ciudadanía nos situó para que siga siendo ese lugar de referencia”, concluyó.

“No quiero prejuzgar al siguiente gobierno. Yo no soy como el Partido Popular, soy totalmente distinta. Yo me quiero irme con elegancia, con la que se debe tener en política”

A preguntas de la prensa sobre la posibilidad de que los proyectos de la Diputación de Pontevedra puestos en marcha en la actualidad, como el de Santa Clara, reconoció que “sufriría mucho si este avance trascendental y único se frena”. Sí dijo que “tengo mis dudas” sobre si el PP mantendrá las políticas de igualdad, medio ambiente, movilidad, cultura y deporte que hasta ahora ha puesto en marcha el bipartito PSdeG-BNG.

“No quiero prejuzgar al siguiente gobierno. Yo no soy como el Partido Popular, soy totalmente distinta. Yo me quiero irme con elegancia, con la que se debe tener en política”, apostilló.

Respecto a quién ocupará la presidencia de la Diputación con el PP, reconoció que prefiere que sea una mujer y “que sea feminista”. “Las mujeres somos capaces de cambiar el mundo”, subrayó.