Un segundo hogar para la parálisis cerebral

La asociación Amencer-Aspace recibe del Concello la residencia habilitada en dos de las plantas del edificio Centro Sur de Campolongo

En la fachada de la nueva residencia destaca una gran rampa para acceder a la primera planta desde el exterior. |   // RAFA VÁZQUEZ

En la fachada de la nueva residencia destaca una gran rampa para acceder a la primera planta desde el exterior. | // RAFA VÁZQUEZ / F. Martínez

El nuevo centro residencial de Amencer-Aspace, habilitado en el edificio Centro Sur de Campolongo, está ya rematado en su primera fase y disponible para atener a 32 personas con parálisis cerebral y otras patologías neuromotoras. El proyecto contempla una ampliación, en una segunda fase, para poder dar atención a las 150 personas integradas en este colectivo.

El Concello de Pontevedra concluyó esta residencia asistencial y ayer la entregó a la asociación Amencer-Aspace, que atiende a las personas con parálisis cerebral y a sus familias, para poder facilitarle la vida a todas ellas.

El alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, y los concejales Anabel Gulías y Marcos Rey (responsables de la gestión municipal de Fondos europeos y de Servicios Sociales) inauguraron las instalaciones, acompañando a algunos de los usuarios de Amencer, sus familias y personal de la asociación, que se hará cargo de la residencia.

El presidente de Amencer-Aspace, Carlos Godoy, indicó que este centro de atención podría acoger a los usuarios el próximo otoño, si bien la asociación está pendiente aún de recibir las ayudas públicas necesarias para asumir la estancia de los internos. En todo caso destacó que el edificio ahora inaugurado, viene a atender una demanda de este colectivo desde que se fundó, hace más de treinta años. “Las familias se sienten apoyadas y Pontevedra puede estar orgullosa de estas instalaciones”, manifestó Godoy.

En la fachada de la nueva residencia destaca una gran rampa para acceder a la primera planta desde el exterior. |   // RAFA VÁZQUEZ

Una usuaria visita una de las habitaciones. | // RAFA VÁZQUEZ / F. Martínez

La inversión de reforma de la residencia superó los 1,5 millones de euros, financiada, por una parte, con Fondos Europeos FEDER concedidos a la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (EDUSI) “Máis modelo Pontevedra” y, por otro lado, por fondos municipales.

El alcalde apuntó por su parte que esta instalación forma parte de un modelo de municipio “que no sería completo si no se atiende a las personas con más necesidades”.

“Con esto cumplimos una necesidad fundamental, imperiosa, porque las personas con parálisis cerebral van teniendo más edad y sus familias no pueden atenderlos bien porque ellos también tienen más edad”, explicó el alcalde.

Recordó que esta reforma, en un edificio que formó parte del colegio de la ONCE, se hizo posible gracias a la firma del convenio con la organización de ciegos, que permitió incorporar al Concello el gimnasio y la residencia ahora denominada Centro Sur, habilitada para entidades vecinales en la planta baja y para Amencer en las dos plantas siguientes.

Queda pendiente reformar los dos últimos pisos de este edificio, que serán destinados a la asociación Amizade, que tiene como misión principal conseguir la plena inclusión de las personas con discapacidad en todos los ámbitos de la sociedad.

Los usuarios también comprobaron la calidad de los baños. |   // R. V.

Los usuarios también comprobaron la calidad de los baños. | // R. V. / F. Martínez

El convenio con la ONCE también permitió conectar esta zona con la ciudad, a través de una nueva carretera que une Campolongo con la avenida de Vigo, a través de una calle que es continuidad de la Rúa de Santa Lucía pero que podría ser renombrada en su tramo nuevo.

La reforma del edificio, realizada por la empresa Construcciones Ramírez con un presupuesto de algo más de 1.500.000 euros, supuso la reformulación del inmueble, con el objeto de destinar dos de sus pisos a residencia para personas dependientes.

Esta nueva residencia para personas con parálisis cerebral es la segunda construida en el municipio, tras la de la Asociación Juan XXIII, que atiende a personas en situación de vulnerabilidad psicosocial.

“Esta residencia nos da esperanzas de futuro”

El centro asistencial ayer inaugurado “viene a resolver uno de los problemas de Amencer desde que nació: dar a los usuarios la posibilidad de lograr su desarrollo y que las familias se sientan apoyadas en la labor de proteger a sus hijos, dándole esperanzas de futuro”, dijo el presidente de Amencer-Aspace, Carlos Godoy. El portavoz de las familias con personas con parálisis cerebral destacó que el edificio ayer entregado por el Concello “no es una dependencia cualquiera”, ya que resolverá el futuro de muchas personas y de sus familias, una vez que los progenitores ya no puedan hacerse cargo de sus hijos con alguna patología neuromotora. Godoy agradeció el esfuerzo realizado por el Concello de Pontevedra con esta obra, con la que las familias “se sienten apoyadas”, dijo. También subrayó que la ciudadanía de Pontevedra puede sentirse orgullosa de estas instalaciones.

En nombre de la corporación municipal, el alcalde de Pontevedra recibió un cuadro pintado por los usuarios de Amencer, que se colocará en la Alcaldía.

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