Alrededor de 250 personas voluntarias participaron ayer en una nueva jornada de reforestación organizada por el PortAmérica, dentro de la iniciativa “Una entrada, un árbol”, en la que participa el festival desde hace cinco años y por la que los asistentes al mismo pueden convertir su entrada en un árbol con el objetivo de reforestar los montes más cercanos a los espacios en los que tiene lugar el evento musical y gastronómico.
En esta ocasión el escenario escogido ha vuelto a ser Outeiro Grande, en el monte vecinal de Lantaño, en Portas, en una jornada en la que también participaron el alcalde del municipio, Ricardo Martínez; el teniente de alcalde, Alfonso Vázquez, y la concelleira Ana Peña. Además de los 250 voluntarios, también tomaron parte miembros de las brigadas forestales de la Xunta de Galicia, que asesoraron en todo momento a los participantes en el proceso de reforestación.
En total se plantaron 300 pies de ocho especies diferentes de árboles: castaños, arces, cerezos, alcornoques, avellanos, nogales, fresnos y carballos. Como explican los organizadores del PortAmérica, el objetivo es compensar las emisiones de CO2 generadas durante la realización del festival con estas plantaciones que también servirán de franja de protección frente a incendios e incrementarán la biodiversidad de la zona. Al mismo tiempo, al ser algunas de estas especies de fruto, podrán tener un aprovechamiento sostenible por parte de la fauna y los vecinos del municipio.
Cada árbol fue identificado con una etiqueta biodegradable en la que cada persona encargada de plantarlo pudo poner su nombre o el de quien quisiera.
Este año, el festival celebra la llegada de su plantación con un sorteo de carácter sostenible. PortAmérica sortea 50 packs de bombas de biodiversidad, de las que crecerán, tras plantarlas, flores atlánticas, resultado de una actividad para disfrutar en familia, con amigos o uno mismo, de las que los afortunados se llevarán un pedazo del Atlántico y del festival PortAmérica.