Nueva vida para el movimiento vecinal

En Centro Cultural de Xeve, en Santa María, fue escenario ayer de la primera reunión para reactivar la Asociación de Vecinos de la parroquia, sin actividad desde hace años. Eligio Casal preside la comisión gestora, cuya primera iniciativa fue convocar el encuentro de ayer a fin de recuperar a los antiguos socios, y la previsión en que en un plazo de dos meses convoque la asamblea general extraordinaria para elegir la nueva junta directiva.

“Como comisión gestora”, recuerda el equipo provisional de dirección, del que forman parte otros cinco vecinos, “no nos permiten hacer nada con las administraciones”, de modo que restablecer el certificado del Registro de Asociaciones de la Xunta es uno de los primeros objetivos.

A pesar de que la asociación interrumpió su actividad, los vecinos han desplegado un intenso trabajo en los dos últimos años para recuperar el patrimonio de la parroquia, “que estaba muy abandonado”, recuerdan. Así, se encargaron de la limpieza de dos fuentes, la de O Casal, que estaba prácticamente enterrada en la zona de Gondar, y la Fonte da Santiña, que disponía en su momento de tejado y que “habrá que recuperar más adelante con un proyecto de restauración”.

La Fonte da Santiña contaba con una imagen de la patrona de la parroquia, Santa María, que ha desaparecido. Se desconoce si fue vendida, ya que una curiosidad de este manantial es que es parte público y parte privado, el agua está compartida entre una casa grande, hoy restaurante, y una parte vecinal que da a la calle.

“No somos restauradores, ni historiadores, ni arqueólogos, pero somos vecinos que queremos recuperar para la parroquia todo este patrimonio”, explican los integrantes de la comisión gestora.

Este trabajo de recuperación también incluyó la restauración del antiguo armonio de Santa María. “Estaba en la iglesia”, señalan, “no sabemos cómo llegó hasta allí, si fue una compra de la parroquia, una donación de un particular…”

Tras pasar por el taller de restauración, el instrumento musical, con más de 120 años de antigüedad, se estrenó con un concierto extraordinario en la iglesia de la parroquia.

Otras acciones desarrolladas en los últimos meses son la limpieza de caminos públicos, muy especialmente en el cruce principal de la parroquia, en las inmediaciones del Pazo de Gondar. Se trata de viales que “hoy en día no se usan”, ya que se han construido otros accesos, y los vecinos son conscientes de la importancia de recuperarlos.

En 2 kilómetros cuadrados la parroquia atesora un gran patrimonio, el más antiguo el Castro Maúnzo, de la edad de bronce y ligado a leyendas, pero también pazos, casonas o una riquísima toponimia. Ésta indica, por ejemplo, que hubo espacios para ahorcar

“Estamos en contacto con Patrimonio del Concello”, indican en este punto, “que está haciendo un inventario” de este tipo de elementos patrimoniales, en los que Santa María de Xeve es muy rica.

Y es que en 2 kilómetros cuadrados la parroquia atesora un gran patrimonio, el más antiguo el Castro Maúnzo, de la edad de bronce y ligado a leyendas como la que recoge el antropólogo Buenaventura Aparicio Casado, que señala que por debajo este poblado prehistórico “está minado” y en él se escondían los mitológicos “mouros”, con “túneles que llegan hasta la Casa de Gondar”.

Éste, a su vez, se encuentra actualmente en ruinas, en una parroquia en la que “había un sistema de trabajo de tierras del señor, porque era un señorío”, recuerdan los vecinos. Los labradores pagaban foros y después arrendamientos históricos, primero una parte de la cosecha y después en dinero.

Asociado al pazo está A Torre Vella. “Sabemos que hay restos de una torre fortaleza con foso por excavar”, otros elementos de la historia de Santa María de Xeve que la comisión gestora quiere poner en valor.

También está el antiguo Concello, de 1909, hecho por vecinos de una tierra de canteiros y con varias canteras en uso. De una de ellas salió la piedra para construir la Escuela Naval Militar, “que hicieron vecinos de aquí, iban y venían de Marín andando; y el que hacía unos cuartos se compraba una bici”.

Hubo una cárcel pública, que aparece en el Catastro de Ensenada, restos de una pequeña edificación conocida como Audiencia en la que se ejercía la justicia señorial.

Otra gran área de trabajo en la que inciden los vecinos es en la toponimia, en la que Xeve es igualmente rica. Cuentan con espacios como A Forca, en un monte cercano, en donde se supone que ahorcaban a los reos, si bien no han localizado los restos: o O Rollo, en Santo André, en referencia a las columnas que marcaban la jurisdicción del señorío y que no pocas veces eran utilizadas para atar a los condenados al escarnio. Son elementos que se han perdido, bien porque se tiraban o eran reutilizadas para elaborar otros, como cruceiros.

En total, numerosos campos de trabajo (amén de los desafíos actuales de la parroquia) en los que centrará su actividad en adelante la recuperada asociación vecinal.

Suscríbete para seguir leyendo