Un profesor de Xestión Pública, único español en un proyecto europeo sobre el fin de la URSS

Celso Cancela forma parte del equipo de trabajo de una iniciativa centrada en la Cadena Báltica, una movilización que supuso “el principio del fin” de la Unión Soviética

Imagen de la Cadena Báltica. |   // PROYECTO BALTIC CHAIN

Imagen de la Cadena Báltica. | // PROYECTO BALTIC CHAIN / C. P.

C. P.

El profesor de la Facultad de Dirección e Xestión Pública Celso Cancela es el único representante de una universidad española en el proyecto europeo Baltic Chain (Bacha), que trabaja en el estudio de la “Cadena Báltica”, un acontecimiento que “marcó de alguna forma el principio del fin del régimen soviético”.

“El 23 de agosto de 1989, aproximadamente dos millones de personas unieron sus manos en una cadena humana que se extendió cerca de 675 kilómetros a lo largo de los tres estados bálticos, Estonia, Lituania y Letonia, que aún estaban bajo la ocupación soviética”. De este modo presentan los responsables de Baltic Chain la movilización pacífica que centra y da nombre a esta iniciativa seleccionada en la convocatoria comunitaria European Remembrance. A través tanto de actividades divulgativas como del estudio de esta movilización, el proyecto busca profundizar en la “contribución que supuso de cara a la integración europea” la Cadena Báltica.

Uno de los objetivos es estudiar como “la participación ciudadana es necesaria para crear una sociedad más cohesionada y justa”, a través en este caso de un “evento histórico extremadamente importante”

Coordinado por el investigador de la Universidad Tecnológica de Tallin Archil Chochia, Bacha fue seleccionado en una convocatoria dirigida a “destacar personajes o eventos que contribuyeron de alguna forma a resaltar y configurar la identidad europea”, como recuerda Cancela. Con esa idea, el proyecto comprende la organización de una serie de acciones divulgativas en siete países gracias a la participación, junto a la institución coordinadora y a la UVigo, de la Universidad de Letonia, de la Vytautas Magnus University (Lituania), de la Palacký University Olomouc (República Checa), de la Universidad de Bialystok (Polonia) y de la Comenius University de Bratislava (Eslovaquia), junto con las organizaciones Eesti Poliitiliste Liit MTU y Radosas Idejas.

Movilización masiva

Como apunta Cancela, los impulsores de Bacha no buscan “hacer un estudio histórico”, sino “ver en qué medida estos acontecimientos ayudan a crear identidad europea”, al tiempo que exploran cómo “los valores de la libertad y la democracia” asociados a la Unión Europea influenciaron a las reivindicaciones a favor de la independencia de los estados bálticos, que en 2004 entraron a formar parte de la UE. “La cadena báltica es un evento con unas connotaciones y unas dimensiones políticas considerables”, añade este investigador, que recuerda que la movilización dirigida a “poner sobre la mesa la ilegitimidad de la ocupación soviética” se hizo coincidir con el 50 aniversario del pacto Molotov-Ribbentrop, en el que la Unión Soviética y la Alemania nazi acordaron, recuerda, “el reparto de esa zona”. En este punto, el investigador del área de Ciencia Política y de la Administración-Observatorio de la Gobernanza G3 incide en que la Cadena Báltica supuso en cierta medida el “inicio del fin de la URSS”, contribuyendo al “clima que fue erosionando el bloque” y a que, siete meses más tarde, Lituania se convirtiera en la primera república soviética en declarar su independencia.

Al mismo tiempo, Cancela incide en el interés que tiene desde el punto de vista investigador el hecho de que fuera una movilización “que partió de la sociedad civil”, para analizarla desde “la perspectiva de la acción colectiva”. Otro de los puntos de interés del estudio de la Cadena Báltica, añade, será la “repercusión global” de la que fue “probablemente la primera movilización masiva” y cómo esta dio lugar a “réplicas” en décadas posteriores, “como la cadena formada en Cataluña en 2013 u otra anterior en Hong Kong”.

Actividades en 2023 y 2024

Al otro lado del propio análisis del acontecimiento, el objetivo de Bacha, como recoge su memoria, es poner de relieve cómo “la participación ciudadana es necesaria para crear una sociedad más cohesionada y justa”, a través de un “evento histórico extremadamente importante” cuyo grado de conocimiento “es muy diferente” en las repúblicas bálticas con respecto al resto de Europa.

Con esa idea, entre las actividades que está previsto que se desarrollen en 2023 y 2024 figura tanto la organización de talleres, seminarios web, conferencias y mesas redondas, como otra serie de acciones de carácter divulgativo. Entre ellas, una exposición itinerante en los diferentes países participantes, que reunirá fotografías de la Cadena Báltica junto a información y vídeos sobre el contexto histórico de esta movilización, así como la puesta en marcha de una web que reúna testimonios de ciudadanos involucrados en este acontecimiento.

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