Plancton estrecha el cerco contra la basura marina

Más de 6 toneladas de residuos recogidos el año pasado, mediante la realización de siete acciones de limpieza en otras tantas playas y cinco actuaciones en fondos marinos, dando participación a 669 voluntarios que emplearon más de 2.500 horas trabajando por el medio ambiente y los demás en once localidades diferentes.

Ese es el balance de la segunda edición del Plan de Conservación Territorial On (Plancton), mediante el cual Afundación, la Obra Social de Abanca, implica a agrupaciones de mariscadores, cofradías, clubes de submarinismo, centros educativos, grupos ecologistas como Hábitat y otros colectivos e instituciones.

Un trabajo que se suma al desarrollado en 2021, cuando la primera edición de Plancton consiguió eliminar más de 19 toneladas de basura marina en el litoral gallego.

1.435 voluntarios

Dicho de otro modo, que desde su puesta en marcha, Plancton ha retirado del mar 25,5 toneladas de residuos en trece localidades, implicando a 1.435 voluntarios que emplearon unas 5.700 horas de su tiempo en esta lucha contra la contaminación.

Así las cosas, Afundación ha vuelto a conseguir que las rías gallegas y el Parque Nacional de las Islas Atlánticas tengan menos basura en sus aguas, contribuyendo a la preservación medioambiental y la protección de las especies que habitan este entorno, tanto peces como cetáceos y aves, por citar algunos ejemplos.

Más concretamente, ha eliminado esas 25,5 toneladas de residuos tras la realización de 24 actividades de limpieza de arenales y fondos marinos en las que colaboraron unas 1.435 personas, entre voluntarios de Abanca e integrantes de las diferentes entidades (35) que han querido sumarse a esta estrategia en estos dos años.

Mucho por hacer

Entre todos han logrado mejorar el estado de salud de las rías gallegas, pero también consiguieron dejar patente que queda mucho trabajo por hacer, ya que se ha constatado que el ser humano sigue generando ingentes cantidades de residuos de todo tipo que acaban contaminando el que es medio de vida y fuente de riqueza para el conjunto de la sociedad.

Esa es otra de las conclusiones que pueden extraerse del balance de Plancton; una estrategia multidisciplinar desde la que “fomentar la conservación y sostenibilidad de las actividades socioeconómicas” vinculadas al sector mar-industria.

Especialmente en Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPAs) existentes en el ámbito marino de Galicia, de las que forman parte, precisamente, el Parque Islas Atlánticas y enclaves como el Complejo Ons-O Grove y el Complejo Intermareal Umia-O Grove, Lagoa Bodeira y Punta Carreirón.

En Pontevedra

De todo ello dio cuenta ayer Afundación en su sede de Pontevedra, donde quiso presentar el resumen de lo que ha dado de sí Plancton en 2022, cuando se recogieron las 6,5 toneladas de basura marina antes referenciadas, y hablar del conjunto de programa, con esas 25,5 toneladas totales puestas a buen recaudo y/o eliminadas.

Una presentación en la que se recordaron jornadas de limpieza de fondos marinos como la celebrada en marzo de 2022 en Guidoiro Areoso, con 52 participantes y 13 embarcaciones que recogieron 1.150 kilos de basura.

Antes de que el 22 de abril se eliminaran 1.834 kilos más en la limpieza de fondos de marisqueo de O Grove, en este caso con 62 participantes que eran integrantes de la cofradía y cuatro voluntarios de Afundación.

Cambados

Aquel mes también se limpiaron fondos de marisqueo en Cambados (62 participantes y 1.733 kilos de residuos recuperados). A lo que se sumó en noviembre la puesta en marcha de una campaña de recogida pasiva de basura marina en el puerto cambadés, donde hasta el próximo 31 de marzo se sigue recogiendo la basura que traslada la flota a tierra.

A todo ello se sumaron las jornadas de eliminación de basura y especies invasoras en playas como la de Areoso, A Illa, Sálvora, Cortegada y Cíes.

“Disfruta en la playa sin dejar huella”

Por cierto, que al hacer balance de lo que ha supuesto Plancton el año pasado, Afundación no podía olvidarse de “Disfruta en la playa sin dejar huella”, una de las múltiples campañas puestas en marcha con el objetivo de “concienciar sobre la importancia de compatibilizar las actividades relacionadas con el turismo y la conservación del entorno”.

Fue una propuesta lanzada en la isla de A Toxa y centrada en impulsar buenas prácticas en las playas que se utilizan tanto para el baño como para el marisqueo, de ahí la participación de las cofradías de pescadores de O Grove y A Illa, junto con la agrupación vilagarciana de marisqueo y turismo Amarcarril.

Lo que se buscó con ello, durante todo el verano, fue sensibilizar a los bañistas en el máximo respeto a los recursos que la naturaleza proporciona.

Xastelas (A Illa) y la playa Compostela-A Concha (Vilagarcía) y A Toxa acogieron esta iniciativa amparada por el programa Plancton para, por ejemplo, evitar que los bañistas entierren colillas en la arena, que recojan su basura al marcharse y que eviten alterar el paisaje moviendo arena, piedras o conchas.

Lo que se hizo fue realizar recomendaciones a los bañistas a pie de playa, acompañando esto de una exposición itinerante al aire libre, con vallas publicitarias, autobuses y otros soportes.

Con idénticos fines, Obra Social de Abanca lanzó el año pasado un vídeo mediante el que poner en valor el islote de Areoso dando a conocer “sus importantes valores ambientales, arqueológicos y económicos”.

Y “también con el objetivo de despertar una conciencia sostenible en la sociedad en general, se desarrollaron distintas actividades de sensibilización y formación sobre el valor intrínseco de la biodiversidad y de su conservación y su sostenibilidad económica”, remarcaron ayer en Afundación con motivo de la presentación del balance de Plancton.

El mismo acto en el que se resaltó la relevancia de la serie audiovisual “Mulleres de mar”, cuya finalidad es “visibilizar el papel de la mujer en el sector de la pesca”.

Otra forma de concienciar en materia de sostenibilidad

Afundación incide así en que Plancton no es solo una herramienta con la que eliminar basura marina, sino también una hoja de ruta desde la que concienciar a la sociedade sobre la importancia de la sostenibilidad.

Objetivo que se logra dando a conocer los resultados de las diferentes acciones de limpieza desarrolladas a lo largo de todo un año, sino también promoviendo diversas actividades de sensibilización y formación.

Sobre todo ello se insistió ayer con motivo de la presentación de los resultados de Plancton 2022, en presencia de la presidenta de la agrupación de marisqueo a pie de A Illa, Inmaculada Rodríguez, y la coordinadora de Sostenibilidad de Abanca, María García Cabeza.

Junto a ellas, el director gerente de Afundación, Pedro Otero, además de la coordinadora general de Responsabilidad Social Corporativa e Institucional de Afundación, Pilar Alves, el director de Abanca Mar, Javier Fraga, y la directora técnica del proyecto Plancton, Saleta González.

Pedro Otero hizo hincapié en que actividades como Plancton permiten a cada organización participante “aportar experiencia y conocimiento en muy diversas áreas, logrando así unos objetivos de elevado beneficio social”.

En el caso concreto de Afundación, “lo que hicimos fue poner nuestros recursos a disposición de un proyecto en el que el respeto medioambiental es el eje estratégico para un avance social sostenible e igualitario, asentado en la conservación activa del territorio y desde el convencimiento de que la sostenibilidad es la garantía de un futuro de respeto e igualdad”.

Con Ona Carbonell y en una playa de Guipúzcoa

La segunda edición de Plancton, desarrollada en 2022, tuvo dos particularidades que la diferenciaron de la primera, como fueron la mediática participación de una deportista mundialmente conocida como Ona Carbonell –que se sumó a la limpieza efectuada en la isla de Cortegada–, y la organización de la primera limpieza fuera de Galicia, en Guipúzcoa.

Dos singularidades que, como era de esperar, no pasaron desapercibidas ayer, durante la presentación del balance del programa realizada en Pontevedra.

Una puesta de largo de resultados en la que se agradeció la firme implicación de la nadadora Ona Carbonell, medallista olímpica y embajadora de la Obra Social y Educación Financiera de CECA, la entidad que gestiona la obra social de las cajas y bancos españoles.

Al tiempo que se hizo hincapié en esa primera vez que el programa se llevó fuera de Galicia, con una actividad de limpieza de microplásticos desarrollada en la playa guipuzcoana de Zarautz.

Y no solo se habló de ello en la presentación matinal realizada ayer ante los medios de comunicación, en la sede pontevedresa de Afundación, sino también en el transcurso de la jornada divulgativa desplegada por la tarde en el mismo lugar ante los colectivos participantes y representantes del sector del mar.

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