La alerta por lluvias se mantiene hoy tras dejar ayer inundaciones en Fernando Olmedo

La alerta naranja en la costa y la amarilla por episodios de intensas lluvias en tierra en las Rías Baixas debido a la meteorología adversa se dejaron notar ayer, especialmente por la mañana, en la ciudad de Pontevedra. Una fuerte tromba de agua que cayó a partir de las 9.15 horas volvió a levantar alcantarillas, inundar garajes y locales comerciales así como a formar bolsas de agua en las calzadas. Fue un episodio bastante rápido y, como llegó, se fue. La alerta se mantiene para la jornada de hoy domingo.

Según indican los bomberos, sobre esa hora comenzaron a entrar múltiples llamadas alertando de incidencias por la acumulación de agua en carreteras, varios locales comerciales y levantamiento de tapas de alcantarilla de las que manaba abundante agua. Aunque se recibieron avisos de distintos puntos de la ciudad, con la dotación existente tuvieron priorizar su atención hacia aquellas alertas que consideraron más urgentes y, como es habitual, la zona más afectada era Fernando Olmedo. Aunque no fueron tan intensas como en otras ocasiones, el agua volvió a entrar en algunos comercios en donde los propietarios se vieron obligados a limpiar en profundidad antes de iniciar su actividad diaria.

También se coló el agua en algunos garajes comunitarios. Uno de los más afectados volvió a ser el que está situado justo en la confluencia entre Casimiro Gómez y Fernando Olmedo. Los usuarios de los mismos, ya previsores ante la alerta emitida y tras la experiencia de anteriores ocasiones, habían retirado los vehículos con anterioridad.

Las lluvias fueron tan intensas que la comarca de Pontevedra registraba, al filo del mediodía de ayer, los mayores datos de precipitaciones acumuladas de toda Galicia. Por ejemplo, se alcanzaron 48 litros por metro cuadrado desde las doce de la noche en la estación de Campolongo e incluso de 58 en la del Puerto de Marín. A esa hora era la cifra más elevada en la comunidad aunque más tarde se vieron superadas por estaciones en Noia con 73 litros por metro cuadrado o Fornelos, con 65,1.

Las lluvias también provocaron el desbordamiento del río de Os Gafos. Es el sexto del invierno. Dicen los “riveiráns” que para que “sexa bon ano ten que botar sete veces fora”. Ya solo queda una más.