Acompañados por la melodía de la gaita, el acordeón y la percusión gallega, un grupo de alrededor de una quincena de niños y niñas recorrió ayer las principales plazas y calles de la ciudad para ofrecer a los pontevedreses los tradicionales “Cantos de Reis”, pequeñas piezas de literatura popular que fueron transmitidas oralmente a lo largo de los siglos en el territorio gallego.

Os Chichisos reviven los tradicionales Cantos de Reis en las plazas de la ciudad

De la mano del grupo de música tradicional y asociación cultural Os Chichisos, los pontevedreses pudieron deleitarse con las canciones que los jóvenes interpretaban antaño en las casas de las aldeas y parroquias, antes de la celebración del Día de Reyes.

Esta tradición, que el colectivo lleva ya 21 años manteniendo en el centro de la ciudad –solo interrumpidos en 2021 por la pandemia de COVID–, era una costumbre habitual en las fiestas navideñas, cuando cuadrillas de hombres, adolescentes y niños se juntaban para cantar de puerta en puerta y conseguir a cambio un “aguinaldo”, que generalmente se componía de vino, chorizos o dulces, entre otros, para después celebrar una gran fiesta todos juntos.

Los “Cantos de Reis” dieron comienzo con una presentación del grupo de intérpretes. Antiguamente, con el cántico inicial se pedía permiso para entonarlo delante de las viviendas que se visitaban. Tras el relato principal, los “reiseiros” terminaban con una estrofa de alabanza a los inquilinos de la casa en cuestión, si estos eran generosos con el aguinaldo; en caso contrario, la canción finalizaba de forma hiriente si los habitantes del lugar no compartían algunos víveres con el grupo. Una jota o una muiñeira ponía el punto final al repertorio.

La actividad, incluida en la programación de Navidad del Concello de Pontevedra, dio comienzo en torno a las 17.30 horas de la tarde de ayer, y en cada parada los viandantes se acercaban al grupo para escuchar a los pequeños entornar las canciones tradicionales.

Sin duda, una de las que más éxito generaba entre los transeúntes era el canto cuya letra rezaba: “Se non nos dás nada, caghamos aquí/ se non nos dás nada, caghamos aquí”. Entre risas, estos se acercaban para aportar algunas monedas ante la simpática interpretación del grupo de niños y niñas.