Maica Larriba: “Declararse constitucionalista tiene que ser algo más que un mero eslogan”

La Subdelegación del Gobierno en Pontevedra acogió ayer el acto conmemorativo del 44 aniversario del refrendo popular de la Constitución Española de 1978. Fue una ceremonia breve y con avisos a navegantes por parte de la representante del Ejecutivo central en la provincia, Maica Larriba, en el sentido de que la Constitución y sus valores no solo deben respetarse con palabras, sino con hechos.

Un discurso en el que dejó mensajes entre líneas, algunos más directos y otros más indirectos, reivindicando unos valores esenciales de la Constitución que, considera, “debemos tener más presentes que nunca”, sobre todo en momentos como el actual “cuando la ciudadanía asiste atónita a su incumplimiento reiterado” (¿Una crítica al bloqueo en la renovación del Poder Judicial?) o “cuando la descalificación o el insulto pretende convertirse en una manera de hacer política”, en clara referencia a las últimas intervenciones, especialmente de la ultraderecha de Vox, en el Congreso de los Diputados.

“Declararse constitucionalista tiene que ser algo más que un calificativo o un mero eslogan”, resaltó la subdelegada, “tiene que ser un compromiso total con la norma y, por supuesto, cumplirla en su totalidad y no solo en aquellos artículos que nos interesan cuando más nos conviene”. Por eso lamentó que hoy “pervivan maneras muy alejadas del espíritu impregnado en la Constitución y que nos permitió a lo largo de estos cuarenta y cuatro años ir consolidando derechos y avanzando, convirtiendo a España en una democracia moderna y ya en muchas ocasiones ejemplos para otros estados”.

Larriba reclamó: "Altura de miras para trabajar por el interés del conjunto del país e impregnar España de futuro en un momento histórico que atravesamos tras salir de una pandemia y cuando tenemos una guerra en las fronteras de Europa”

Por ello, Maica Larriba reclamó a todos “altura de miras para trabajar por el interés del conjunto del país e impregnar España de futuro en un momento histórico que atravesamos tras salir de una pandemia y cuando tenemos una guerra en las fronteras de Europa”. Al igual que en el 78, apostó por dejar atrás de una vez esa España “en blanco y negro, por una llena de color”.

En este sentido, apeló a aprovechar las posibilidades que brinda el Plan de Recuperación y los fondos europeos para relanzar el estado de bienestar y la transformación social y económica” que necesita España.

La lectura de artículos de la Constitución previa a su discurso finalizó recitando el número 32 de la Carta Magna: “Todos contribuirán al sostenimiento de los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica mediante un sistema tributario justo inspirado en los principios de igualdad y progresividad que, en ningún caso, tendrá alcance confiscatorio”. Precisamente, el que está dedicado al modelo impositivo en el que se remarca ese carácter justo, igualitario y progresivo. La subdelegada acabó, precisamente, con una referencia a la necesidad de aumentar la carga impositiva a los que más tienen para ayudar a los que menos. Señaló que el compromiso del Gobierno al que representa es “seguir avanzando en derechos y oportunidades para la ciudadanía con normas que protejan a los más débiles y con obligaciones para aquellos que más tienen y que más deberían contribuir al progreso conjunto de toda la sociedad española”.

Al acto también asistieron representantes de distintos partidos políticos, sobre todo del PSOE y del PP, además de diputados, senadores, el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, la jueza decana y autoridades militares de la Brilat, la Escuela Naval Militar, la Guardia Civil y la Policía Nacional, entre otros. La ceremonia, presidida por un ejemplar de la Constitución, finalizó con la interpretación de los himnos de Galicia y de España a cargo de la Banda de la Escuela Naval Militar de Marín.

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