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Sanxenxo vive un renacimiento inmobiliario y triplica en dos años sus viviendas nuevas

El número de licencias de obra sube en Poio, Cuntis o Portas, pero se estancó en 2021 en Pontevedra, a pesar de sumar autorizaciones más para 150 domicilios de nueva planta

Una promotora está construyendo 57 pisos de alta gama en el solar en el que se levantaba la antigua discoteca Zoo en Sanxenxo. | // G. SANTOS

Sanxenxo parece vivir una nueva “primavera” en el sector del ladrillo. La construcción de vivienda nueva, que se había estancado, ha pegado un fuerte estirón tras la pandemia. Al menos esto es lo que se desprende de los datos actualizados por el Instituto Galego de Estatística (IGE) que recogen las licencias urbanísticas concedidas por concellos el pasado ejercicio.

Este municipio ha sido, con diferencia, el que ha experimentado un mayor incremento en cuanto al número de licencias concedidas en toda la comarca. Fueron un total de 45 para inmuebles de nueva planta, de los que 36 son para uso residencial. Esto supone 22.209 metros cuadrados más de viviendas (frente a los 6.602 de hace dos años o los 10.130 de 2020). Los datos también hacen pensar en un resurgimiento de la construcción de la vivienda colectiva, dado que las 36 licencias otorgadas a lo largo de 2021 son para un total de 108 viviendas de nueva planta, frente a las 26 viviendas de 2019 o las 47 de 2020, sin duda un salto cuantitativo importante. Junto a los permisos que se requirieron para otras 12 viviendas en rehabilitación y las tres para demolición se concluye que el parque de nuevas viviendas en Sanxenxo el pasado año creció en total en 119, frente a las 54 de 2020 y las apenas 35 de 2019, antes de la pandemia.

Hay otros municipios en los que el mercado inmobiliario también se reactiva, aunque en menor medida que en Sanxenxo. Es el caso de Poio. En 2021 autorizó 34 licencias para edificios de nueva planta, 18 más que el año anterior. En este caso, la pujanza de la vivienda colectiva parece menor, dado que este importante incremento de licencias no se traduce en un crecimiento exponencial de las viviendas de nueva planta, que solo suben de 15 a 17. En total, al final de año su parque de viviendas se había incrementado en 21 frente a las 16 del año pasado, gracias también al tirón de la rehabilitación (con 9 domicilios con permiso para su recuperación).

Cerdedo-Cotobade (que pasa de 5 a 9 licencias de obra), Cuntis (que cuadriplica pasando de 4 a 16), Portas (que registró 11 frente a las 6 de 2020) y Vilaboa (con tres permisos más el pasado año) son los otros municipios de la comarca en los que el la construcción vio incrementada su actividad.

¿Y qué pasa con la capital de la provincia? La actividad inmobiliaria sigue siendo intensa pero se estanca respecto al pasado año. Se concedieron 18 permisos para edificios de nueva planta según el IGE (los mismos que en 2019 y uno más que en 2020) pero el número de viviendas de nueva planta cae considerablemente. Frente a las 236 de 2020, el pasado año se registraron 150 solicitudes.

Pese a ello, estamos ante la tramitación de casi 404 viviendas nuevas en la ciudad del Lérez en dos años, una cifra bastante elevada y que tiene su reflejo en las promociones que ahora están ya construyéndose en zonas como A Eiriña, Eduardo Pondal o en los antiguos terrenos de Tafisa.

La ciudad del Lérez registró más solicitudes para rehabilitación que para inmuebles nuevos

De las 37 licencias de obras presentadas ante el Concello de Pontevedra el pasado ejercicio (siempre según los datos del IGE), un total de 17 lo fueron para trabajos de rehabilitación de inmueble. Uno más que los edificios de nueva construcción (hay otro permiso más solicitado pero es para una demolición). Esto demuestra que el pasado año la rehabilitación de inmuebles registró una actividad incluso superior a la de construcción de nueva planta. De estos 17 edificios en rehabilitación son pocos también los que presentan un importante volumen de vivienda colectiva (es decir, se trata de casas unifamiliares o pequeños inmuebles de una o dos plantas en su mayoría, así como otros no destinados a uso residencial) dado que tan solo dieron lugar a 11 viviendas en rehabilitación. Son más que las 10 del ejercicio de 2020 pero menos que las 13 de 2019.

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