La Policía Local de Poio y los vigilantes Gardapescas de la Cofradía de Pescadores de San Telmo, interceptaron en la tarde del viernes a una vecina de Poio que practicaba el denominado "furtivismo de bañador".

Fue localizada en la Praia da Norte, en Campelo, mientras disfrutaba de un día de playa, pero además, aprovechaba sus paseos por la zona para recoger almeja japónica " forma furtiva", según la Policía Local.

Se le intervino un kilo, aproximadamente de marisco y se enfrente a una denuncia administrativa ante la Consellería de Medio Ambienta. Además de recoger almeja sin autorización, la mayoría de los bivalvos eran de tamaño antirreglamentario y además, os bancos marisqueros están cerrados estos días por la presencia de toxina.