La acumulación de bajas laborales en la plantilla de los Bomberos de Pontevedra, que afecta al menos al 33% del personal, obliga al Concello a nombrar nuevos trabajadores interinos más, utilizando la lista de reserva disponible. Si hace unos días se designaba a un bombero-conductor, ahora el gobierno local ha iniciado los trámites para contratar a tres más, uno de ellos para “la cobertura de un trabajador durante su reducción de jornada” y los otros dos debido al “exceso o acumulación de tareas en el servicio”, según se detalla en el anuncio.

El Concello ha comunicado a cuatro posibles aspirantes si están interesados en cubrir estas plazas de forma interina, con la advertencia de que, según las bases de la convocatoria, “una primera renuncia supondría la exclusión de la lista durante seis meses y una segunda provocaría la exclusión definitiva”.

El servicio de Bomberos acumula meses de precariedad en el número de efectivos que imposibilita cubrir los turnos con normalidad.