El proyecto de reforma integral de Luís Seoane, de 348.000 euros, transformará una calle sin salida en una plaza en las inmediaciones de la Avenida de Vigo, un tipo de espacio del que actualmente carece esta zona. La reforma solucionará problemas detectados en la calle, como el excesivo número de vehículos aparcados todo el día, el mínimo espacio peatonal o la mala iluminación. Habrá dos plataformas de 80 centímetros de altura que permitirán salvar el desnivel con la calle, nuevo mobiliario urbano y al final de la calle, en la zona limítrofe con Manuel Colmeiro, se colocarán luces LED en el suelo.
