La Feira de Artesanía Chalana arrancó hoy en Pontevedra con su decimoquinta edición, con la Praza da Ferrería como epicentro de la venta de productos de alta calidad en los que se trabajan materiales como el papel, la plata, el cuero o el aloe vera.
Un evento distintivo del verano de la ciudad que estará disponible hasta el día 7 de agosto, en horario de 11.00 a 14.00 y 19.00 a 22.30 horas todos los días.
Para los productores, Chalana es una oportunidad de acercar al público sus creaciones en un contexto complicado como el de ahora, dejando ya atrás los estragos causados por la pandemia.
Así lo define el joyero Mario López, con dos décadas de experiencia convirtiendo en accesorios la plata de utensilios como cucharas o tenedores.
“Yo me dedico a la venta directa –en tiendas y ferias– y a mí me afectó bastante particularmente. Aún estamos remontando esa situación anómala”, contextualiza López, que ha participado en esta feria en varias ocasiones.
Esa experiencia tan complicada, recuerda, se hizo más llevadera gracias a la apuesta realizada en Pontevedra por Chalana, que mantuvo su edición de 2020 pese al contexto sanitario.
“Pontevedra, en particular, fue una de las pocas ferias que se hicieron y eso fue muy positivo. Haber recibido el apoyo de la ciudad y de la organización, pero sobre todo del público, que se volcó con nosotros, fue un alivio”, recuerda.
Además de los tradicionales productos de artesanía, con el cuero o el metal como protagonistas, la Feira Chalana también es una oportunidad para reinterpretar los usos de otros materiales y sacar a las calles ideas más sostenibles.
Es el caso de la marca Melena de Papel, que debuta en este evento con su línea de bolsos elaborada con papel reciclado entrelazado.
“Nosotros salimos digitalmente en plena pandemia. Nos pilló por completo y hasta hoy, que estamos empezando con ferias, fue todo digital”, detalla Bárbara Martínez, creadora de estos accesorios.
“Eventos como este nos dan una oportunidad de que la gente pueda ver los bolsos, tocarlos y tener una mejor referencia de la calidad”, asegura.
En ese sentido, la expectación en torno a la feria es un sentimiento compartido con otros artesanos. “Venimos a tope, con muchas ganas de mostrar nuestros productos al público”, comenta.
