Las quejas por la falta de personal en los centros de salud de la comarca se siguen sucediendo. El BNG de Marín denunció que a partir de este viernes 1 de julio, el Centro de Salud de Marín experimentará un nuevo recorte en su funcionamiento, "ya que debido a la falta de personal facultativo no habrá consultas médicas en horario de tarde en los meses de verano".
A esta situación hay que añadir que en los últimos días el Punto de Atención Continuada (PAC) tuvo que ser atendido por personal médico de Bueu, dejando a este ayuntamiento sin servicio de urgencias y obligando al vecindario de Bueu a tener que asistir a Marín en caso de una urgencia médica.
La portavoz municipal del BNG de Marín, Lucía Santos, denuncia que “el Centro de Salud de Marín viene padeciendo problemas en la atención sanitaria prestada, consecuencia de la política de recortes y privatización que lleva aplicando el gobierno de la Xunta durante los últimos 13 años.”
Para la formación nacionalista, el personal sanitario "resulta insuficiente desde hace tiempo, trabajando en precario, provocando listas de espera de semanas, líneas telefónicas saturadas, personas con dolencias crónicas que no están recibiendo una buena atención, demoras en las revisiones de pediatría o lista de espera de hasta varios meses para consulta de dentista o fisioterapia, por lo que esta nueva medida vendrá a empeorar considerablemente el servicio de atención primaria de nuestro ayuntamiento".
El ayuntamiento de Marín cuenta con una población de alrededor de 24.000 habitantes, que se ve incrementada durante los meses de verano, por lo que ven "imprescindible un servicio de atención primaria que ofrezca unos servicios óptimos y en condiciones".
Es por esto que Lucía Santos insta a la alcaldesa María Ramallo a “demandar de la Consellería de Sanidade la dotación del personal sanitario necesario para garantizar una atención sanitaria de calidad en los centros de salud de Marín y Seixo.”
Segundo a portavoz municipal del BNG “la precaria situación de la atención primaria es el resultado de la política del PP, que está desmantelando la sanidad pública para beneficiar a la privada, primero con el gobierno de Feijoo y ahora con el gobierno de Rueda, que pretenden acabar normalizando este tipo de anomalías en el servicio sanitario.”
Lucía Santos recuerda que “lamentablemente Marín no es un caso aislado. Bueu, Moaña, Cangas, Sanxenxo, Lalín y muchos más ayuntamientos gallegos llevan padeciendo el desmantelamiento premeditado de la sanidad pública, que se acentúa mucho más en los meses de verano con el cierre de consultas y la eliminación de servicios por falta de personal médico.”
