En el área sanitaria de Pontevedra-O Salnés, al igual que en el resto del territorio, ya no es obligatorio el uso de la mascarilla, salvo algunas excepciones, pero aún son muchos los pontevedreses que mantienen este método de protección, ya que la evolución de la incidencia del COVID no se atenúa. Al menos así se desprende del balance ofrecido este viernes por el Sergas, con datos actualizados a las 18.00 horas del jueves.
Este parte muestra que crecen de nuevo los casos activos en el área, hasta los 1.678, lo que supone un aumento de 146 sobre la jornada anterior. En las últimas 24 horas se han detectado 207 nuevos contagios, si bien no se contabilizan los enfermos leves que dan positivo en autotest en los domicilios, por lo que todo apunta a que la cifra total puede ser más alta. Además, se otorgaron 61 altas.
En cuanto a la presión, hospitalaria, una estadística más fiable para comprobar el avance de la pandemia, este último balance muestra de nuevo un aumento del número de ingresados, con 91 en los hospitales del área, ocho más que el día anterior.
De ellos, 88 están en planta, sobre todo en el CHOO, donde hay 72, mientras que hay tres en la Unidad de Cuidados Intensivos de Montecelo. Es un enfermo crítico más que en la jornada anterior.
En esta jornada, en la que se llega casi a los 64.000 curados desde el inicio de la pandemia, no se ha notificado ningún fallecimiento, por lo que se mantiene la cifra de 276 víctimas mortales en el área, 47 de ellas en lo que va de año.