Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Esta botica es una joya

La farmacia Eiras, que encabeza José Luis Domínguez, es la decana de la Boa Vila, cumple150 años y conserva su imagen original

José Luis Domínguez, que cumplió ayer 34 años al frente de la farmacia más antigua de Pontevedra. | // RAFA VÁZQUEZ

En casa de boticario todo son mejunjes y herbolarios. A José Luis Domíguez lo define bien el dicho popular, al que habría que añadir el buen gusto de haber protegido y conservado la farmacia más antigua de la ciudad, ubicada en la plaza de A Verdura.

El boticario celebró ayer su 34 aniversario al frente de la farmacia decana, a la que llegó con solo 26 años. “Fue el 1 de abril de 1984 cuando abrí por primera vez la puerta”, recuerda, “ya venía de trabajar en Carballiño, también en una farmacia, y me fue fácil adaptarme”. Oriundo de Ourense, explica que estos 38 años “he sido muy feliz con la gente y en esta ciudad maravillosa”.

Tuvo claro desde un primer momento que conservaría la imagen original del despacho de farmacia, salvo ligeras variaciones como la reposición del suelo de madera, que estaba muy deteriorado. Por lo demás, “todo es igual que en los años setenta del siglo XIX, cuando abrió la botica”, indica.

La puso en marcha Enrique Eiras Puig en la calle San Román, en el entronque con la plaza de A Verdura, en 1872, según figura en distintas inscripciones en el interior de la botica, si bien el libro de registro retrasa esta inauguración hasta 1976

decoration

La puso en marcha Enrique Eiras Puig en la calle San Román, en el entronque con la plaza de A Verdura, en 1872, según figura en distintas inscripciones en el interior de la botica, si bien el libro de registro retrasa esta inauguración hasta diciembre de 1976. “Hay dudas sobre la fecha”, explica en este punto José Luis Domínguez, “me dijeron que ya estaba en 1972 y lo que supongo es que se hizo alguna reforma y por eso aparece una segunda fecha. En cualquier caso está exactamente igual que en esos primeros años”.

¿Cómo es trabajar en una botica de 150 años? “Te acostumbras bien”, resume el farmacéutico, “la otra en la que trabajaba era moderna pero en realidad el trabajo y la atención al cliente son los mismos”.

Lo que cambia es el escenario, en el que además de los mostradores de castaño y tapa de mármol se han conservado las estanterías decoradas y pintadas o un techo decorado con la alegoría de una matrona semidesnuda que representa la medicina, acompañada de ángeles y la leyenda “Ars cum natura ad salutem conspirans” (El arte colaborando con la naturaleza para la salud).

Una leyenda cuenta que fue el propio Enrique Eiras Puig quien pintó en el techo de la farmacia una alegoría, semidesnuda, de la Medicina, inspirándose en una vecina que le habría servido de modelo

decoration

Y a propósito de leyendas, una cuenta que fue el propio Enrique Eiras Puig quien pintó esa figura, inspirándose en una vecina que le habría servido de modelo.

Las puertas y los suelos hidráulicos también datan de los primeros años, al igual que la báscula, que oportunamente explica en su cajetín que se trata de un “Aparato. Funciona mediante la introducción de una moneda de 10 céntimos”.

En general el local ha sufrido pocas modificaciones, entre las que figura la supresión de un almacén anexo o de una valla ante el mostrador, que en las imágenes históricas aparece metálica y en la actualidad es de madera.

José Luis Domínguez tampoco quiso renunciar a la colección de antiguos fármacos, que hoy adornan las estanterías: quinina básica irradiada, pepsina o arseno tuberculina son algunos de los medicamentos que se conservan en sus envases originales.

En estos años ha sido plató de rodaje de distintos filmes, el más reciente la serie de Amazon protagonizada por Jean Reno “para la que se cambió el aspecto del interior”, señala el boticario

decoration

La ambientación se completa con el instrumental, botes y jofainas que en su día se utilizaron para la elaboración de fórmulas y que hoy contribuyen al encanto de la farmacia, que en estos años ha sido plató de rodaje de distintos filmes, el más reciente la serie de Amazon protagonizada por Jean Reno “para la que se cambió el aspecto del interior”, señala el boticario.

También los turistas se fijan en la farmacia, si bien “solo hacen muchas fotos y selfies”, explica José Luis Domínguez, el grueso de cuya clientela “es familiar, aquí hay pocos clientes de paso, casi todos son fijos y vienen regularmente”. Lo prueba la facturación anual “que salvo variaciones ligeras es siempre la misma, más o menos todos los meses nos piden las mismas recetas y se hacen las mismas cajas”.

La clientela “es familiar, aquí hay pocos clientes de paso, casi todos son fijos y vienen regularmente”. Lo prueba la facturación anual “que salvo variaciones ligeras es siempre la misma, nos piden las mismas recetas y se hacen las mismas cajas”.

decoration

En estas casi 4 décadas “no ha cambiado mucho el perfil de los clientes”, añade, “salvo en los últimos años que viene gente más joven a la que le gustan las farmacias antiguas”. Se trata en muchos casos de alumnos o profesores de la universidad y también influye en este cambio la ubicación en A Verdura, plaza en la que se reúnen decenas de grupos.

Es un lujo trabajar en este escenario, reconoce José Luis Domínguez, “estoy contento o me habría jubilado”, una posibilidad que por ahora no contempla. En todo caso, le gustaría que tras retirarse la botica “siguiese como farmacia y mantuviese este carácter original”.

Compartir el artículo

stats