Si el turismo ya fue uno de los sectores que más sufrió (y lo sigue haciendo) debido a la pandemia, la guerra en Ucrania aparece ahora como un nuevo posible factor desestabilizador del sector, al menos en lo que responde al turismo exterior y en estos momentos de conflicto. Por el momento, las agencias de viajes de Pontevedra consultadas no están detectando cancelaciones de viajes. Sí que se ha visto algún caso en agencias arousanas, pero en Pontevedra el efecto del conflicto en Ucrania y la posibilidad de extenderse a otros países cercanos no parece estar haciendo mella en la actividad de las agencias.
En principio, porque tampoco son principales destinos para los viajeros pontevedreses y en segundo lugar porque, desde la pandemia (y ahora más con el estallido del conflicto armado) parece que se está registrando un cambio de hábitos entre el viajero pontevedrés.
"Las reservas para este turismo interior, a destinos de España y Portugal, están subiendo en las últimas semanas”
La crisis sanitaria y ahora el conflicto de Ucrania están repercutiendo en un impulso del turismo nacional o de proximidad. “Nosotros no estamos notando nada por el momento porque también es cierto que los viajes al extranjero habían caído bastante”, explican desde la agencia de viajes Deza, en la calle Michelena. “Ya con la pandemia nuestros clientes parecían decantarse más por destinos de España o Portugal, de hecho, las reservas para este turismo interior están subiendo en las últimas semanas”. Canarias y el resto de las islas son otros de los destinos más demandados. “Nosotros estamos preparando viajes en autobús para Semana Santa y alguna vez nos pasó que no los completamos y este año se está apuntando más gente de lo habitual”, remarcan.
Y es que los pontevedreses no parecen dispuestos a dejar de viajar por el COVID-19 o el conflicto bélico en el Este de Europa. “Lo que el cliente busca es viajar con más tranquilidad o planificar el viaje de manera más segura, por eso eligen destinos nacionales y se contratan muchos seguros de cancelación”, en este caso, quizá más achacable a los posibles efectos de la pandemia.
“Lo que el cliente busca es viajar con más tranquilidad o planificar el viaje de manera más segura, por eso eligen destinos nacionales y se contratan muchos seguros de cancelación”
Una impresión similar transmiten desde la agencia de Viajes Rascado, en Guitérrez Mellado. No están notando influencia del conflicto armado ni cancelaciones por este motivo, aunque también destacan que sí que sus clientes se están decantando más por el turismo interior de España y Portugal que otras zonas de Europa.
Pese a que de momento no hay síntomas de resentimiento en las agencias pontevedresas, el sector tiene miedo que si el conflicto se agrava pueda acabar por afectar a este sector en el año que se esperaba de recuperación tras la pandemia. Mar Rodríguez, gerente de la agencia mayorista Tee Travel y presidenta de la Asociación de Agencias de Viajes de Pontevedra (Avipo) explica que la guerra ya afecta al sector a nivel general. “La gente tiene miedo”. Explica que en el caso de Tee Travel tenían contactos con viajeros de Estados Unidos o Australia que ya han dicho que por ahora no volarán a Europa. “Aunque Galicia esté lejos del conflicto, ven un poco absurdo salir de sus países para acercarse al problema por un viaje de ocio”.
Sector mayorista
Rodríguez confirma que en el caso de los viajeros españoles las cancelaciones no se producen dado que los usuarios se sienten más tranquilos desplazándose a estos destinos de proximidad.
La presidenta de Avipo señala que el sector tenía muchas esperanzas puestas en el 2022 y espera que la situación no se tuerza: “Veíamos que después del COVID-19 la gente tenía muchas ganas de viajar y contábamos que, con que este Año Xacobeo sería importante, todo el mundo estaba dispuesto a reservar con mayor antelación porque contaba con que este año habría una ocupación alta”, pero ahora, “manda otra vez la incertidumbre”.
A todo esto, Avipo, también da por hecho que el sector se verá afectado por la subida de precios, especialmente de los vuelos, sobre todo por el incremento de precios que se está registrando en los combustibles.
