Desde la época romana los gallegos tomamos filloas. Es el postre típico por excelencia del Entroido, con perdón de las orellas, y el gran protagonista esta semana en los expositores de las pastelerías y cafeterías de la Boa Vila.
Hasta el próximo fin de semana distintos establecimientos de hostelería ofrecen degustaciones y menús típicos de Carnaval, en el marco de las Xornadas Gastronómicas organizadas por el Concello en colaboración con el Centro Comercial Urbano (CCU) Zona Monumental. Por su parte, en las pastelerías “se nota bastante el incremento de ventas”, constatan en Meu Bakery & Coffe, en la calle Riestra, donde desde hace unos días los clientes acompañan el café con orellas.
Los mayores se decantan habitualmente por las orellas “y las madres suelen pedir para los niños filloas rellenas, especialmente de crema”, señalan en Acuña, toda una tentación carnal por la que dejarse llevar antes del inicio de la Cuaresma
“Es lo que más nos piden”, explican los profesionales de esta panadería-pastelería, “seguidas de las filloas sin relleno”. En Meu Bakery & Coffe (uno de los establecimientos que contribuyó este Carnaval al éxito de la I Feira das Reposterías e Pastelerías, que recibió a 10.000 visitantes) se percibe claramente el repunte de ventas en comparación con el pasado año. “Hay bastante más gente, como también hay más gente en la calle en comparación con antes, que estaba todo cerrado”, explican.
Tras un año de parón, el programa festivo retoma el pulso con citas como el Día Pirata y el Concurso de Murgas y, en paralelo, los golosos pontevedreses han vuelto a la tradición de degustar y regalar estos dulces, tan típicos del Carnaval como los disfraces o el humor, y que ponen la guinda a la exquisita gastronomía del Entroido.
En la víspera del festivo local hicieron una buena caja. “Se vendió muy rápido, especialmente las orellas, que es lo que más nos piden aquí, de hecho enseguida vendemos todo el stock”, indican los profesionales.
En la confitería Capri, un clásico entre las pastelerías locales, la demanda es “mucha, porque son postres típicos que solo hacemos una vez al año y la gente los está esperando”, señalan las vendedoras
También en la confitería Capri, un clásico entre las pastelerías locales, la demanda es “mucha, porque son postres típicos que solo hacemos una vez al año y la gente los está esperando”, señalan las vendedoras.
Éstas constatan que los clientes “están deseosos” de estos dulces. De hecho, señalan que la demanda es tanta que “acaba Reyes y ya empezamos a hacer filloas”. Y es que este postre típico es lo que más se despacha en Capri, especialmente las rellenas, que en esta pastelería de la calle García Camba pueden elegirse con nata, crema o mouse de chocolate.
Tras las filloas, son las bandejas de orejas y flores las que más pronto desaparecen de los expositores.
Las profesionales explican que “se vende mucho” y generalmente en el grueso de las confiterías el stock de estos productos de temporada “no llega a mediodía”, explican
Otra pastelería donde se agotan rápidamente estos días los dulces de Entroido es el despacho de Acuña en la calle Benito Corbal. Las profesionales explican que “se vende mucho” y generalmente el stock de estos productos “no llega a mediodía”. Los clientes son de todas las edades: los mayores se decantan habitualmente por las orellas “y las madres suelen pedir para los niños filloas rellenas, especialmente de crema”, toda una tentación carnal por la que dejarse llevar antes del inicio de la Cuaresma.
La botica de Perfecto Feijoo cobra vida en Carnaval
Durante el Entroido la botica de Perfecto Feijoo vuelve a la vida en la plaza de A Peregrina, donde ayer se dieron cita personajes relevantes de la época en la que Ravachol vivía en la farmacia. Ésta ha sido ambientada un año más con botes de fórmulas, recetarios e instrumental para emular la antigua imagen que debió tener el popular establecimiento que visitaron personajes como Emilia Pardo Bazán, José Echegaray, Manuel Quiroga o Pablo Sarasate.
Comando Foucellas puso música a la recreación, en la que no faltaron los trajes de época ni el recuerdo a Ravachol. Y es que el emblema del Carnaval pontevedrés, que este año volvió a la Boa Vila tras recibir las tres vacunas, preside esta semana las fiestas desde la plaza de A Peregrina, convirtiéndose en el gran protagonista de los selfies y retratos colectivos que captan vecinos y visitantes. El programa festivo continuará hoy a partir de las 18 horas con animación de calle a cargo de la Charanga BB+.
El acto central de la jornada será la final del Concurso de Murgas. Dará comienzo a en el Pazo a las 21 horas y la protagonizarán las cuatro parodias protagonistas de esta trigésima edición, en la que el formato del certamen se ha visto sensiblemente reducido. Se trata de los grupos Los PTV, Equipo Ja, Val do Lérez y Murga do Naveiro.
