Tras la confirmación de que las tradicionales comparsas de Carnaval de la zona no participarían en los desfiles municipales, Marín vivirá, un año más, un Entroido atípico, a causa de la situación sanitaria actual y de los cientos de contagios diarios desde el surgimiento de casos relacionados con la variante ómicron en la comunidad autónoma y en la provincia.

Participantes en el desfile de Marín de 2020, el último celebrado. FdV

Desde el Concello, sin embargo, el objetivo es adaptar el Entroido a las medidas actuales y, en la medida de lo posible, ofrecer actividades que suplan a las ya canceladas, como el desfile o el Enterro da Sardiña, tradicionalmente organizado por el Ateneo Santa Cecilia.

En este caso, se planea organizar una fiesta infantil con animación, que se celebrará en la Alameda el fin de semana grande del Carnaval y, si la climatología lo impide, se trasladará al Multiusos del Mercado de Abastos. Además, se decorarán las calles y plazas de la villa con lonas en las que se verán imágenes de otros años, y el Palco de la Música se engalanará para el Miércoles de Ceniza.

Así lo han manifestado las concelleiras Marián Sanmartín, Beatriz Rodríguez y Raquel López, tras reunirse con la directiva del propio Ateneo y otros actores principales del Carnaval marinense, como la comparsa Os da Caña o el grupo musical folclórico Pousos da Area.

“Queremos contar en todo momento con los colectivos que forman parte de la organización de nuestro Entroido, apoyando su labor incluso en un año como este, en el que muchas de las cosas que se llevaban a cabo no se pueden organizar de la misma manera que en años anteriores”, explicaron desde la Administración local.

Para la fiesta infantil, la organización ya planea la aparición de comparsas, batucadas y charangas de Marín, con el objetivo de que “se encarguen de realizar una animación acorde a la época de Carnaval”.

Por otra banda, la Asociación Cultural Amigos dos Rapaces estudiará la posibilidad de adaptar a las medidas sanitarias su tradicional fiesta infantil.

Sin embargo, desde esta agrupación han confirmado ya la suspensión de la Fiesta del Merengue, donde los niños y niñas de la villa celebraban el Carnaval rebozándose en harina, huevos y dulce, ya que no se podría llevar a cabo sin comprometer ciertas directrices de seguridad como el uso de mascarilla o la distancia social.

El Concello contempla otras actividades complementarias al guateque, como la Fiesta do Bolo do Pote que tendrá lugar el domingo 6 de marzo o la exposición sobre el Entroido tradicional gallego que estará en el Museo Municipal Manuel Torres durante todas las fechas que abarque el Carnaval.

También se le ofreció al Ateneo Santa Cecilia la posibilidad de organizar su concurso de postres típicos –filloas y orejas–, en una fecha como el 1 de marzo.

“Con todas estas medidas, buscamos mantener vivo el espíritu del Entroido, pero además poder dinamizar Marín durante estos días para que pueda repercutir de forma positiva en el comercio y en la hostelería local”, señalan desde el Concello.