El Pazo da Cultura, el auditorio de Afundación, el salón del Museo u otros espacios accesibles, con escenario y aforo suficientes. Son algunas de las opciones que maneja el Concello para celebrar durante los próximos meses los plenos de la corporación. El cierre, desde hoy mismo, del Teatro Principal en su totalidad para acometer una profunda remodelación, deja a los concejales sin el que ha sido el escenario de sus debates y mociones durante los últimos 22 años. Fue en 1999 cuando el gobierno local de Miguel Fernández Lores, recién llegado entonces a la Alcaldía, decidió dejar de utilizar el salón de plenos de la Casa Consistorial por razones de seguridad, aforo y accesibilidad. La primera sesión se celebró el 27 de noviembre de aquel año.
Dos décadas después, la corporación tiene que mudarse otra vez, al igual que toda la programación cultural del Teatro. En este último caso, se dispone de la alternativa del Pazo da Cultura, pero en cuanto a los plenos, todavía no hay una decisión tomada sobre el nuevo escenario, sobre todo porque aún hay tiempo hasta el próximo, que no sería hasta mediados de febrero.
Las obras de reforma del Principal comienzan oficialmente hoy lunes. El plazo oficial de ejecución es de tres meses, aunque fuentes municipales apuntan a que podrían prolongarse hasta después del verano. En principio se pensó que podría aprovecharse algún espacio del edificio de la calle Charino durante los trabajos, pero finalmente se comprobó que no era posible.
Las obras de reforma del Principal comienzan oficialmente hoy lunes. El plazo oficial de ejecución es de tres meses, aunque fuentes municipales apuntan a que podrían prolongarse hasta después del verano.
Una de las reformas consiste en reemplazar toda la estructura de iluminación del escenario, lo que impide su uso durante la ejecución, incluidas las sesiones plenarias”. El principal problema del “salón de plenos” alternativo es que reúna las condiciones necesarias como accesibilidad, aforo para el público (aunque últimamente no es muy numerosos, hay que garantizar su asistencia), un escenario suficiente para albergar a los 25 concejales y los funcionarios y, sobre todo, que disponga de un sistema de grabación para registrar electrónicamente las actas. Y no hay muchos espacios que cumplan todos estos requisitos.
Además del escenario, el patio de butacas o los camerinos, el Principal dispone de numerosas dependencias, con entrada por la calle Don Filiberto, que se utilizaron como oficinas durante meses, pero ahora están vacías, tras el estreno de los locales municipales de Herreros. Por tanto, desde hoy, el inmueble queda totalmente vacío. Solo habrá operarios.
El Concello adjudicó a dos empresas, por cerca de medio millón de euros, las obras de reforma, modernización y mejora del Teatro Principal, para actualizar su accesibilidad y dotarlo de una moderna iluminación, entre otras actuaciones. El primer apartado se ha adjudicado por 186.000 euros, mientras que el capítulo de la iluminación ronda los 238.000 euros.
Un ascensor
En conjunto se trata de acometer el refuerzo estructural, la reforma de los aseos (que podrán ser utilizados por personas ostomizadas), un ascensor y un nuevo equipo lumínico.
La accesibilidad es el segundo de los grandes motivos de la reforma. Se renovarán los aseos de la planta baja y en el vestíbulo se instalará un ascensor que se ubicará en la actual zona de las escaleras. Será una estructura de cristal, a fin de “minimizar su impacto visual”, que conectará con el bajo –donde están ubicados los camerinos y otros espacios para artistas y mantenimiento– y subirá hasta la tercera planta.
Otra gran apuesta para la transformación del Teatro Principal es el nuevo sistema de iluminación. Con los nuevos equipamientos tecnológicos se persigue lograr un ahorro energético que el Concello estima de “casi el 90%” Con los nuevos sistemas “las mezclas de color se pueden controlar digitalmente”, de modo que se ahorra en filtros, lámparas, recargas etc. Se busca “un paso hacia la profesionalización” y mejorar el Teatro principal, “con un equipamiento de vanguardia”. Tras el desmontaje de infraestructuras, cuadros y cableados, se instalará la nueva iluminación escénica con consolas de control o una red integralmente digital.
El Archivo, otro traslado por obras
La rehabilitación de la Casa Consistorial ya ha tenido un primer efecto: el traslado de los fondos del Archivo Municipal de los bajos del histórico edificio, que a partir del mes de febrero funcionará desde la primera planta de la Casa de la Luz, si bien la mayor parte de la documentación no se localizará en este inmueble de la plaza de A Verdura. En los últimos días las brigadas municipales trasladaron unas 3.000 cajas del fondo del Archivo al Edificio Froebel y al depósito del sótano -2 de Michelena, 30, donde también se encuentran parte de los archivos municipales. El traslado ya se completó y el sótano de la Casa Consistorial está vacío. La Casa Consistorial acogía el Archivo Municipal desde noviembre de 1984. Allí se cobijaban unas 3.000 cajas con documentación datada entre 1834 y 2017.
La Casa Consistorial acogía el Archivo Municipal desde noviembre de 1984. Allí se cobijaban unas 3.000 cajas con documentación datada entre 1834 y 2017.
De hecho, se custodiaba documentación con un enorme valor patrimonial como los libros de actas del Pleno del Ayuntamiento desde 1834 a 2004, los libros de actas de los antiguos ayuntamientos de Xeve, Salcedo y Ponte Sampaio, antes de su incorporación al Ayuntamiento de Pontevedra; los libros de actas de la Comisión Municipal Permanente, de la Comisión de Gobierno, de la Xunta de Goberno Local, o los padrones municipales de 1901 a 1965. También se trasladó documentación referente al urbanismo de la ciudad, como el planeamiento urbanístico de 1950 a 1986, o expedientes de obras desde 1960. Debido al próximo inicio de la reforma de la Casa Consistorial, es obligado el traslado de todas las dependencias ubicadas en este edificio (Servicios Técnicos y Archivo) a la Casa da Luz mientras duren los trabajos. Si bien está previsto que una vez que finalice la reforma el equipo de técnicos vuelva a sus despachos anteriores, la oficina de atención al público del Archivo Municipal permanecerá en A Verdura. El traslado se realizará a lo largo de febrero ya que las obras podrán comenzar en el próximo mes o en marzo.
Las sesiones regresarán a la Casa Consistorial de la plaza de España tras su rehabilitación
La ley obliga a celebrar los plenos de la corporación en la Casa Consistorial, salvo “causa de fuerza mayor” que esgrime el gobierno local desde hace 22 años. Pero esas sesiones regresarán al histórico edificio de la plaza de España en 2023, una vez concluya su rehabilitación, recién adjudicada. El futuro salón de plenos será el mismo que el anterior, pero se tratará de un espacio multiusos, para los debates de los concejales una vez al mes pero con otros aprovechamientos el resto del año. En teoría, la reforma de la Casa Consistorial durará un año y la del Principal, tres meses, pero todo apunta a que ambos plazos se prolongarán. Por ello, se estima que los debates plenarios volverán temporalmente a Charino, pero sería por poco tiempo antes de regresar a la plaza de España, donde no se celebran desde 1999.
La reforma de la vieja Casa Consistorial fue adjudicada hace unos días a las constructoras Ramírez, con sede en Pontevedra, y Revivis, en Portugal, con un presupuesto de 1.350.486 euros. Se trata de “rehabilitar la primera planta, actualmente en desuso, para usos institucionales. La intervención deberá servir asimismo para solucionar el problema de accesibilidad desde los accesos y entre los diferentes niveles del edificio”, según el proyecto.
La planta primera se destinará a usos institucionales, con: Salón de plenos, equipado para la presencia de público y con cabina de imagen y sonido, Sala de Comisiones, Sala de recepción de la Alcaldía, Área de trabajo, un almacén y aseos
Con la reforma ahora en marcha se apuesta por destinar la planta semisótano a archivos municipales, con la posibilidad de acondicionamiento para otros usos en un futuro próximo; la planta baja a oficinas técnicas; y la planta primera para usos institucionales, con las siguientes dependencias: Salón de plenos, equipado para la presencia de público y con cabina de imagen y sonido para la retransmisión en directo.
Deberá ser un espacio versátil, con posibilidad de celebración de bodas civiles; Sala de Comisiones, vinculada al salón de plenos y con capacidad de reunión de 15 personas; Sala de recepción de la Alcaldía, de función representativa y dotada de servicios higiénicos propios; Área de trabajo y apoyo a protocolo: con un despacho para dos personas, vinculado a la Alcaldía; un almacén capaz de albergar el mobiliario y enseres de los distintos perfiles de uso; y aseos de planta. El proyecto señala que “en cuanto a la organización general del edificio este deberá contar con dos entradas funcionales: la entrada principal, frente a la Plaza de España, se usará para servicios institucionales y protocolarios; y la entrada a nivel de semisótano desde la rúa Alhóndiga resolverá las circulaciones operativas de las oficinas administrativas sitas en las planta baja y semisótano”.
