La empresa funeraria San Marcos, que recientemente renovó el tanatorio de Poio, afronta este año la apertura de dos nuevas instalaciones en la comarca, en Vilaboa y en Sanxenxo. En este último caso se ubicará en una parcela del polígono de Nantes y será el segundo recinto de este tipo existente en el municipio, si bien también dará servicio a la población de Meaño.

Con un presupuesto de algo más de un millón de euros, las previsiones apuntan a que el nuevo tanatorio esté en servicio el próximo verano. El proyecto ya dispone de licencia municipal para ocupar una parcela de más de 1.400 metros cuadrados y contará con cafetería y aseos además de las salas de velaciones y salón de actos, espacio de carga y descarga, sala de tanatopraxia y cámara de refrigeración, entre otras dependencias.