El odio a través de las redes sociales se ha convertido en una constante del mundo, cada vez más tecnológico y telemático, que nos rodea.

Según un estudio de la Cátedra de Feminismos de la Universidade de Vigo en conjunción con la Deputación de Pontevedra, este acoso cibernético también tiene perspectiva de género.

Esta situación se da especialmente en el ámbito de la política y el periodismo, donde “las mujeres reciben ataques más personales y virulentos que sus homólogos varones”.

Se trata de una conclusión a la que han llegado los investigadores Xabier Rolán, de la Facultade de Ciencias Sociais e da Comunicación de Pontevedra y Teresa Piñeiro, de la Universidad da Coruña, tras analizar 64.000 publicaciones de 20 mujeres políticas y periodistas -de las cuales un 40% dedican su actividad profesional a la provincia de Pontevedra- y 20 hombres de estatus similar en Twitter.

De la crítica al insulto

En su análisis cuantitativo, en el que ambos investigadores han hecho un seguimiento de un año a las cuentas de políticos como Ana Pontón, Gonzalo Caballero, la presidenta de la Diputación, Carmela Silva, o Valentín Gómez Formoso, su homólogo en la provincia de A Coruña, han podido constatar que un 16% de los tuits dirigidos a políticas contenían insultos, por un 13% en el caso de los varones.

En cuanto a las menciones negativas, los hombres recibían un porcentaje superior, del 42%, frente al 31% de las mujeres, aunque son estas las que sufren “ataques de mayor virulencia”, afirma Rolán.

Como complemento a este análisis de datos, en el estudio se incluyó una serie de entrevistas a 13 políticas y periodistas que forman parte de la esfera local y estatal.

Según Rolán, se constata fehacientemente a través de la investigación y de dichas entrevistas que “cuanta más proyección y visibilidad tienen, más odio e insultos reciben”.

Elprofesor pontevedrés añadió, tras conocer la situación, que “prácticamente todas se autocensuran y/o miden muy bien sus palabras” a la hora de intervenir en Twitter, lo que conlleva que en esta red social se lleve a cabo una preocupante y muy relevante “normalización del odio”.

Esta investigación, que prolonga la línea de publicaciones anteriores en este campo apoyadas también por la cátedra de la Universidade de Vigo y la Diputación, contó con la ayuda y el trabajode otros expertos procedentes de la Universitat Oberta de Catalunya y la Universidad Complutense de Madrid.

Además de la publicación convencional de la investigación, el estudio contará con una faceta interactiva para los usuarios que estén interesados en indagar en un grado mayor de detalle sobre la investigación, con una web buscador en el que se podrán consultar ciertos términos y nombres y un podcast divulgativo, cuya creación ya está en marcha, en el que se expondrán en formato radiofónico los resultados finales.