El área sanitaria de Pontevedra y O Salnés ha comenzado a aplazar intervenciones quirúrgicas no urgentes ante la presión que supone para el Hospital Montecelo el aumento de pacientes COVID en la UCI, nueve actualmente, lo que supone el 90% de su capacidad normal, diez camas, que se pueden ampliar hasta medio centenar en otras zonas del centro sanitario.
“Este incremento de pacientes en críticos está empezando a producir distorsiones en el funcionamiento normal del hospital porque no solo tenemos pacientes COVID ingresados en las UCI, sino también no COVID. Uno de los primeros puntos que se ven afectados cuando tenemos muchas camas de intensivos ocupadas es la actividad quirúrgica, debido a esto, se está reduciendo la actividad puesto que estos pacientes que se operan necesitan estar después de la cirugía unas horas o días en una cama de intensivos, que están muy presionadas”, aseguró ayer el doctor Juan Turnes coordinador de hospitalización COVID y jefe de servicio de Aparato Digestivo del Complexo Hospitalario de Pontevedra, CHOP.
En Pontevedra y O Salnés hay 2.515 casos activos de coronavirus, de los cuales 51 pacientes están ingresados, 42 en planta y 9 en UCI.
Además, ayer el Sergas informó de dos nuevos fallecimientos: un hombre de 95 años ingresado en el CHOP y otro de 90 en el Hospital do Salnés, murieron ambos el día 20. Con ellos son ya 220 los fallecidos en el área desde que se declaró la pandemia.
“En el momento actual los datos, comparándolos con la semana pasada, son muy parecidos. El número total de pacientes ingresados es prácticamente el mismo. Sin embargo, hay algunas diferencias respecto a la semana pasada. A pesar de que en términos numéricos la situación es la misma, tenemos dos pacientes más en UCI, con un total de nueve, y el perfil de los ingresados tanto en hospitalización convencional como en UCI es algo diferente. En estos momentos, nueve de los 38 ingresados en Pontevedra son personas no vacunadas, cuando la semana pasada eran dos o tres”, destaca el facultativo.
“Aunque el número de ingresos pueda parecer inferior, se está infectando tanta gente que al final va a crecer y la presión va a afectar todavía más a la actividad sanitaria”. Además, subraya que en cuanto a la edad media, especialmente en la UCI, “ha ido bajando a lo largo de esta semana”.
“Las medidas de intervención se están focalizando no tanto en abrir más camas de hospitalización COVID, sino en actuar en los focos que están viviendo más presión, como son las áreas de Urgencias, cuidados intensivos y Primaria”
Pero no solamente la actividad quirúrgica se verá afectada por este nuevo recrudecimiento de la pandemia, también la actividad de Atención Primaria y los servicios de Urgencias: “Por eso las medidas de intervención se están focalizando no tanto en abrir más camas de hospitalización COVID sino en actuar en los focos que están viviendo más presión, como son las áreas de Urgencias, cuidados intensivos y Primaria”.
En este sentido, Juan Turnes indica que una de las principales causantes de todo esto es que la variante ómicron del COVID se contagia “muchísimo más”. “Aunque los síntomas sean leves, si se contagian muchas personas, habrá muchas otras que van a necesitar asistencia sanitaria, aunque sea por patología leve y eso explica esta mayor saturación en Primaria y Urgencias”, advierte.
“Es como si con la variante delta, que todavía circula, una de cada cien personas infectadas acababa ingresada, pues con ómicron es probable que solo una de cada 200 acabe ingresada, pero lo más seguro es que se infecten mil. De modo que aunque el número de ingresos pueda parecer inferior, se está infectando tanta gente que al final va a crecer y la presión va a afectar todavía más a la actividad sanitaria”, resume.
Plantas de ingreso
Pese al aumento de ingresos en el Complexo Hospitalario de Pontevedra, sigue habiendo tres plantas destinadas a los pacientes COVID. Son las de Neumología y Medicina Interna de Montecelo y la Medicina Interna III del Hospital Provincial.
“Además, hay pacientes ingresados por otras patologías en sus plantas correspondientes”, explica el doctor Juan Turnes.
Esta Navidad va a comenzar significativamente peor que la del año pasado, ya que a estas alturas de 2020 había poco más de 900 casos activos, frente a los más de 2.500 que hay ahora. Similar, sin embargo, es el número de hospitalizados: 50 entonces y 51 ahora.
La gran diferencia en la actualidad es el alto porcentaje de ciudadanos vacunados, muchos de los cuales ya han recibido la tercera dosis de refuerzo. Hoy mismo están convocados en el “vacunódromo” del edificio de la Xunta en Campolongo 2.000 de la franja de edad de 50 a 59 años en turno de mañana y tarde.
Se vacunará también en horario de tarde a 485 niños con autocita de 9 a 11 años que, por los motivos que fueran, no pudieron acudir la semana pasada.
El municipio de Pontevedra es, en términos absolutos, el más afectados con 1.008 casos activos. Y es que en la última semana sumó 564 nuevos, así como 949 si se tienen en cuenta dos semanas atrás. Los otros tres principales concellos de la comarca también están empeorando progresivamente: Marín tiene 200 infectados, Poio cuenta con 146 y Sanxenxo ya registra 74.