Dos hombres de 90 y 95 años fallecidos el pasado lunes, sobre los cuales informó esta noche el Sergas, elevan a 220 el número total de muertos en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés desde que se declaró la pandemia. Ambos tenían patologías previas, aseguran las fuentes oficiales, y estaban ingresados en el CHOP y en O Salnés.

En Pontevedra y O Salnés hay 2.515 casos activos de coronavirus, de los cuales 51 pacientes están ingresados, 42 en planta y 9 en UCI.

La pandemia se recrudece y las autoridades sanitarias llaman a la prudencia a las puertas de la Navidad, ya que hay ahora cinco veces más casos activos que a principios de mes. Recuerdan las medidas básicas: higiene de manos, uso de mascarilla y distancia social.

La situación empeora tanto que la dirección del área ha decidido que se comience a aplazar intervenciones quirúrgicas no urgentes ante la presión que supone para el Hospital Montecelo el aumento de pacientes COVID en la UCI, nueve actualmente.

El municipio más afectado en términos absolutos es el de Pontevedra, con 1.008 casos activos. También están todos los ojos puestos en Marín, con 200 infectados. En Poio hay 146 y en Sanxenxo son 74.