Después de tres meses desde que se iniciase el juicio en septiembre y tras varias sesiones la Audiencia de Pontevedra pudo dejar ayer al fin visto para sentencia el juicio por el alijo de 1,7 toneladas de cocaína halladas a bordo del remolcador “Titán III” en agosto de 2018.
En la última sesión celebrada ayer los abogados de las respectivas defensas concluyeron la exposición de sus informes definitivos y llegó el turno de la última palabra de los acusados que, en su intervención ante las magistradas, sostuvieron su inocencia. Tan solo uno de los acusados reconoció los hechos, y en la jornada anterior su abogado ya había solicitado que se le aplicase la atenuante de confesión tardía y pedía una rebaja más contundente de las penas que la realizada por el fiscal. Los acusados se exponen a condenas que van de los tres años y medio a los 13 y medio.
