El proyecto de una gasolinera low cost en Salcedo, en las inmediaciones del nudo do Pino, acabará en los tribunales. Tras la solicitud de licencia inicial, el Concello emitió un informe desfavorable que la Xunta de Galicia avaló, rechazando el proyecto. La instalación se plantea en las inmediaciones del Lidl de la Avenida de Vigo. La firma que se propone instalar la estación de servicio ha recurrido la decisión de la Xunta ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia a través de un recurso contencioso administrativo.

El alto tribunal ya ha notificado al Concello que deberá comparecer como implicado en la causa.

Según el proyecto propuesto, se trataría de una estación de autoservicio de combustible que estará abierta las 24 horas al día, los 365 días del año, con un único trabajador para atender posibles incidencias. En concreto, se explica que “existirá como mínimo una persona en cada turno para orientar y ayudar a los clientes con el repostaje y la atención de la tienda”. Los combustibles que se ofrecerán serán tan solo dos de los habituales, es decir gasóleo A y gasolina de 95 octanos, y no se hace referencia a la posibilidad de que existan cargadores eléctricos, ahora que se promueve la compra de este tipo de vehículos con un plan de ayudas estatales.

Se indica que la parcela donde se diseña la instalación mide 3.692 metros cuadrados y en ella se montará una marquesina de 152 metros y una caseta de 21. La zona ajardinada llega a más de dos mil metros cuadrados y el presupuesto de ejecución material es de 285.734 euros, pero con la suma de impuestos y otros capítulos, rebasará los 300.000 euros.

El proyecto detalla que “los núcleos de población más cercanos al emplazamiento son San Brais, situado a 287 metros, Matalobos a 288 y a Ponte do Couto, a 270 metros. Son núcleos de población muy pequeños, de entre 10 y 20 casas y a apenas cien metros se encuentra el inicio de lo que se puede considerar como el centro o núcleo urbano de Pontevedra”. Además, el río de Os Gafos discurre a 280 metros de la parcela elegida.

La zona de repostaje, si finalmente sale adelante, “constará de dos isletas” y habrá cuatro mangueras. Además, habrá dos puntos de cobro en metálico. El pavimento será de hormigón y la estructura de la marquesina, de al menos 4,5 metros del alto, será de acero laminado. Habrá también el habitual monolito de precios. El acceso se proyecto por la Rúa de San Brais, de titularidad municipal por la que se entra desde la propia rotonda de O Pino más próxima a la avenida de Vigo.

El proyecto ha suscitado el rechazo del vecindario.