El presidente del Consello Consultivo, José Luis Costa Pillado, ha defendido este miércoles la imparcialidad del órgano que encabeza frente a las acusaciones de los grupos de la oposición en Galicia, que consideran que los informes que emite el organismo consultivo son empleados por la Xunta para refrendar sus decisiones políticas, en especial a raíz de su dictamen favorable a la adscripción de los terrenos de Ence a la zona de servicios del Puerto de Marín. Esta adscripción es la opción que defiende la Xunta (y la propia Autoridad Portuaria marinense) para “sortear” las sentencias de la Audiencia Nacional y lograr que la fábrica de pasta de papel continúe en Lourizán.
Pillado acudió al Parlamento gallego para presentar las cuentas del Consello Consultivo en una mañana en la que también fue el turno del presidente del Consello Económico Social (CES). Tanto el Consultivo como el CES apenas presentan variaciones de cara al próximo año en sus cuentas, con pequeños ajustes en el capítulo de salarios para adaptar la subida retributiva de los empleados públicos en 2022.
Los presupuestos de estos organismos, según han explicado sus titulares Agustín Hernández (CES) y José Luis Costa Pillado (Consultivo), ascienden a un total de 1,4 y 2,7 millones de euros, respectivamente.
Tras la comparencia del conselleiro maior del Consello de Contas, José Antonio Redondo; el siguiente fue el presidente del Consultivo, que presentó unas cuentas que tienen como única novedad el incremento del capítulo de salarios para las veinte personas que trabajan en el órgano dependiente de la Administración autonómica para recoger la subida de las retribuciones para el personal público a nivel estatal.
Así las cosas, según ha señalado ante la Comisión Tercera el presidente del Consultivo, José Luis Costa Pillado, el presupuesto total asciende a 2,7 millones de euros, un 1,62% más respecto al pasado año por la subida del salario de los trabajadores públicos.
En una breve comparecencia en la que destacó que el Consultivo gallego desempeña unas funciones “más desarrolladas” que el resto de órganos análogos a nivel autonómico y estatal, Costa Pillado indicó que el resto de capítulos son “miméticos” a las cuentas del presente ejercicio, por lo que su intervención inicial apenas pasó de los diez minutos.
Durante el turno de los grupos, la oposición, BNG y PSdeG, pusieron el foco en el papel que juega el Consultivo gallego, ya que entienden que su funcionamiento se orienta a refrendar desde la perspectiva jurídica las decisiones políticas del Gobierno gallego.
Así lo expusieron tanto el diputado socialista Pablo Arangüena como el nacionalista Luis Bará, que mostraron sus recelos ante la falta de publicidad de los informes que elabora el Consello Consultivo.
“Es facultad exclusiva del Consello emitir estos informes de carácter jurídico, que mucha gente piensa que son para avalar las decisiones de la Xunta. Siempre le dan la razón y son los únicos que pueden emitirlos”, aseveró Arangüena.
En esta línea se manifestó también Luís Bará, que puso como ejemplo el informe hecho por el Consultivo sobre la posibilidad de adscribir al puerto de Marín los terrenos donde se ubica la planta de Ence.
Para Bará, la conclusión positiva al respecto del Consultivo, trasladada públicamente por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; es “un ejemplo de libro” de la “manipulación de la interpretación” de las actuaciones del órgano, lo que supone “un menoscabo de la imagen y el prestigio de la institución”.
Tras el cierre del turno de los grupos políticos por parte de la diputada popular Paula Prado, que acusó a la oposición de “intentar sacar réditos políticos” de la comparecencia; Costa Pillado defendió la imparcialidad del órgano que preside.
“No actuamos al dictado de nadie”, dijo el presidente del Consultivo, que puso el acento en que “cualquier” administración puede dirigirse al órgano para recabar su opinión.
“De igual modo que nos solicitó la Xunta un informe sobre los terrenos que están ocupados por Ence, lo podría haber solicitado el mismo Concello de Pontevedra”, añadió Costa Pillado, antes de apuntar que la ausencia de publicidad de los documentos del Consultivo se debe a que se interpreta que son de interés del solicitante. En todo caso, ha abierto la puerta a la posibilidad de que se blinde por ley la posibilidad de remitir estos informes a quien “lo estimen oportuno”.
La crítica nació en el Concello
La postura de ayer de Costa Pillado respondía, en el fondo, a las críticas lanzadas hace diez días por el gobierno local. “Estamos admirados de la agilidad de la administración gallega para ciertas cosas”, criticó el concejal César Mosquera, respecto al informe del Consello Consultivo. “Ojalá la tuviera así en otros departamentos, como Costas, Patrimonio...”, ironizó. Mosquera lamenta que “redunda en el desprestigio de la institución”. El gobierno local recordó que la petición de la Xunta “entró el miércoles, y el lunes estaba hecho”, aseguró César Mosquera. También desveló que el informe “no fue unánime”, ya que se había dicho por el propio Consello que tenía este carácter, “pero fue por la unanimidad de los que participaron, porque a otros no los dejaron participar”, explicó César Mosquera. El concejal afirmó que el recorrido del informe del Consello Consultivo es “ninguno” y de haberlo sería “fraude de ley y desviación de poder”.
