El rector de la Universidade de Vigo, Manuel Reigosa, confía en que el Grado en Diseño comience a funcionar en el curso 2022-2023 en la sede provisional del edificio de Benito Corbal, como medida temporal, mientras se construye un nuevo edificio en la parcela de la antigua fábrica de Tafisa, al que se trasladarían las facultades de Diseño y Dirección y Gestión Pública.

El rector hizo este anuncio en una sesión ordinaria del Consello do Campus de Pontevedra. La sede del edificio de Benito Corbal para el Grado en Diseño se formula como una solución “temporal”, previa a la construcción de ese nuevo edificio en la parcela que el Concello cederá a la institución académica. En ese sentido, Reigosa destacó que “intentaremos que, de ser posible”, cuando la primera promoción de estudiantes de esta nueva titulación “llegue a segundo o tercero ya tengan su propio edificio y puedan estar todos juntos y desarrollar la teoría y las prácticas de la mejor manera posible”.

Como antes hizo en el Consello de Goberno, Reigosa trasladó a los asistentes el orden de prioridades de las diferentes acciones previstas para dotar de nuevos equipamientos a los tres campus. Entre ellas está el edificio de Deseño y Dirección e Xestión Pública. Reigosa quiso reflejar “nuestro agradecimiento al Concello de Pontevedra”, que “en una negociación muy abierta” se mostró “absolutamente favorable al apoyo de la Universidad”. En este punto, recordó que este proceso tendrá como punto de partida la firma de un convenio de cesión de la parcela en la que se situaba antiguamente la fábrica de Tafisa, que “ya no estará ligado a la devolución” al Concello del edificio en el que se encuentra la Facultad de Bellas Artes.

El futuro inmueble, señaló, se convertirá en la sede del futuro Grado en Diseño, que “nuestra idea es que comience a funcionar en el curso 2022-2023” en las plantas que la Xunta cederá a la institución académica en el edificio administrativo de Benito Corbal.

Reigosa señaló que ya fueron adjudicadas las dos licitaciones públicas abiertas para equipar las tres plantas que se cederán a la UVigo. No obstante, defendió, una vez se vayan incorporando nuevas promociones tras el primer curso “no parece una localización muy lógica para una titulación”, dado que se trataría “de una quinta, sexta y séptima planta, que además tienen otros destinos”.

En su informe, Reigosa se detuvo también en el estado en el que se encuentran los dos procesos de negociación “que más nos ocupan ahora mismo”, los referidos al nuevo mapa de titulaciones y al Plan de Financiación del Sistema Universitario de Galicia. Con respecto a este último, destacó que se trata de un acuerdo “prácticamente finalizado”, que supondrá una “mejora para las tres universidades”, y que en el caso concreto de la UVigo, “que desde el punto de vista económico no tenemos mayores obstáculos, nos va a permitir coger velocidad en muchas cosas que tenemos que hacer”. En lo referido al nuevo mapa de titulaciones, Reigosa expresó su diseño de que estas negociaciones permitan “traer para Pontevedra algún grado adicional”.

El vicerrector del campus, por su parte, hizo balance de diferentes iniciativas impulsadas en los últimos meses de acuerdos con el Concello de Pontevedra.