El edil de Obras urbanas, Demetrio Gómez, anunció ayer que el Concello de Pontevedra paraliza el proyecto de peatonalización de la calle Alemania de Monte Porreiro, dado que “el mismo colectivo vecinal que en su día pidió la ordenación del tráfico en la zona, dice ahora que no es una prioridad” para el barrio. El concejal matizó que el gobierno local no descarta por completo el proyecto. Simplemente priorizará otras necesidades de la urbanización, entre ellas actuaciones de mantenimiento del espacio público, antes de emprender esta obra valorada en casi un millón de euros. Tampoco se instalarán los bolardos diseñados específicamente para el barrio y que se presentaron recientemente como parte de la obra.
El anuncio se produce tras la manifestación vecinal que el pasado viernes demandó la paralización del proyecto.
La asociación de vecinos O Mirador, que lidera la oposición al proyecto, indicó ayer a través de su portavoz, Carlos Diéguez, que los residentes siguen exigiendo que se mejore el tráfico en el barrio y que no se oponen a ningún plan de mejora, sino únicamente a la peatonalización de la calle Alemania. Siguen reclamando al concejal Gómez Xunqueira que se reúna con los vecinos para tratar estos asuntos y le recriminan que trate de culpar a la asociación vecinal de la paralización del proyecto de mejora. Subrayan que únicamente se opusieron a la peatonalización de la calle Alemania.
El Gobierno local de Pontevedra explicó, por su parte, que centrará las prioridades en el barrio de Monte Porreiro en el sostenimiento del espacio urbano, para dejar aparcado el plan de reforma integral de parte de las calles Grecia y Alemania, “dado que cambiaron las prioridades generales del barrio, tal y como se ha demostrado en las últimas semanas”.
Están contabilizados entre 8.000 y 10.000 vehículos diarios en la zona
Demetrio Gómez indica que el Concello tenía conocimiento “por muchas vías, desde la asociación de vecinos hasta la comunidad escolar, personas que trabajan en los Camiños Escolares o, incluso, mociones plenarias”, de la necesidad de atajar dos problemas que se sucedían en ese punto del barrio: eliminar el tráfico de paso (están contabilizados entre 8.000 y 10.000 vehículos diarios por el cruce) y mejorar la seguridad viaria en los entornos escolares.
Una vez localizado el problema, el Concello encargó la redacción de un proyecto que llegó ayer a la Alcaldía. Recuerda además que el trabajo de recoger e identificar los problemas ha llevado unos dos años.
Llegado a este punto, el concejal de Obras indicó que “parece que ahora no es una prioridad en Monte Porreiro, pues no hay mayor problema. Seguiremos trabajando en las obras de sostenimiento del espacio público en marcha”.
También confirmó que parejo al proyecto de reforma integral de las calles Alemania y Grecia estaban otras intervenciones como la dotación de agua potable a tres edificios de la calle Cambria, proyecto con el que el Concello continúa adelante “y que tendremos que ejecutar el antes posible”.
PSOE
Desde el grupo municipal del PSOE, su portavoz, Tino Fernández, aseguró que ha recibido con satisfacción la decisión adoptada por sus socios de Gobierno, con los que ya había mediado “con la intención de que las actuaciones que se efectúen para mejorar el barrio de Monte Porreiro se hagan siempre con el máximo consenso posible con sus vecinos”. Fernández entiende que la respuesta vecinal “ha tenido una magnitud que se debe tener en cuenta” y aguarda que el diálogo “siga siendo la principal herramienta para ejecutar las mejoras que requiere esta zona de la ciudad”.
Partidarios de la obra
Por su parte, la plataforma vecinal Monte Porreiro Quere Avanzar traslada “su total tristeza por el retraso que sufrirá ahora la llegada del modelo Pontevedra a Monte Porreiro”, lo que supondría, según este colectivo, “la mejora de la calidad urbana para el barrio”.
Monte Porreiro Quere Avanzar lamenta que se pierda “la mejora de la calidad urbana en el barrio”
“Consideramos que de alguna manera todos perdemos, nadie gana nada. Compartimos por completo el afán del ayuntamiento por alcanzar un consenso mayor, mediante el diálogo con el vecindario y los negocios de la zona, así como con su tejido asociativo. Esperamos que sean conversaciones productivas, de las que salgan mejoras para el barrio y su vecindario, y que, poco a poco, el modelo de ciudad que es Pontevedra pueda incluirnos a nosotros como un barrio ejemplar”, expone la plataforma partidaria de la reforma.
Este modelo urbano para el barrio “deberá darse mediante el intercambio de ideas de manera respetuosa, sincera y sin busca de enfrentamiento, y por eso queremos expresar también que las palabras del presidente de la Asociación de Vecinos O Mirador, recriminando ahora al concejal responsable de Obras Urbanas la paralización del proyecto contra el que fue desde el minuto menos uno, resultan para nosotros absolutamente incomprensibles. Que considere un recochineo que el Gobierno local recule, como él mismo solicitó insistentemente, parece que solo busca el enfrentamiento directo, de nuevo, con el Concello de Pontevedra, una actitud que ni comprendemos, ni consideramos para nada buena para el barrio”.
Para finalizar, Monte Porreiro Quere Avanzar agradece la promesa del Concello de Pontevedra de “seguir estudiando vías de inversión en el barrio y la mano tendida al diálogo, tan preciso en esta situación a la que no deberíamos haber llegado, y a la que llegamos por el mal hacer de todas las partes”.
El colectivo confía en que “todos aprendamos de los errores, y que, a partir de este momento, se de un diálogo real, cara a cara y sin insultos, ni amenazas, ni coacciones”.
Los opositores mantienen el calendario de protestas para pedir un plan de mejoras sin cortar el tráfico en las calles
La asociación de vecinos O Mirador, que representa a los opositores al proyecto, mantiene el calendario de protestas previsto, ya que considera que la última decisión del Concello respecto al plan de reforma no es válida. Los residentes insisten en que siempre defendieron la necesidad de un plan de mejora en la urbanización, pero no la peatonalización de una parte de la calle Alemania, eje central del barrio. Así, mantendrán el programa de protestas. La próxima será el sábado 2 de octubre, con una concentración en la calle Alemania a las seis de la tarde. También está prevista una concentración el viernes 8 delante del Concello de Pontevedra, a partir de las 12 del mediodía. Siguen esperando a que el concejal de Obras se reúna con los portavoces vecinales para explicarles personalmente cuáles son las intenciones del Gobierno local respecto al barrio. Por su parte, la plataforma vecinal Monte Porreiro Quere Avanzar indica que una intervención amplia en las calles Grecia y Alemania, la expulsión del tráfico ajeno al barrio, la mejora de todas las aceras, la renovación de los servicios subterráneos o el asfaltado de las carreteras internas son solo algunos ejemplos de las necesidades del barrio “y esperamos que el Gobierno Local cumpla su palabra y lleve a cabo todo cuanto le sea posible por y para la urbanización de Monte Porreiro y sus vecinos”. “Monte Porreiro es un barrio muy grande, el más grande de la ciudad y tiene ansia por avanzar, por mejorar. Es preciso que avance, que se adapte a los nuevos tiempos, y la única manera que existe de hacerlo es con la palabra como mediadora”, añade.
