36 kilómetros no son nada cuando la meta por alcanzar es la solidaridad. La Plaza de la Peregrina se convirtió ayer para más de 500 personas en esa meta común a la que aspirar, después de unir caminando la distancia que separa las ciudades de Vigo y Pontevedra. Una conquista para sensibilizar sobre la importancia de donar médula ósea y plantar cara a la leucemia.

Los miembros de la Asociación Discamiño fueron los primeros en cruzar la meta. | // GUSTAVO SANTOS

Personas con diversidad funcional, jóvenes, pero también mayores, aceptaron el reto que les proponía la Asociación Frangil y caminaron. Caminaron por la unión de dos ciudades, pero también por construir un firme vínculo social, en defensa de una causa justa y necesaria como es la vida. La marcha solidaria “700 camisetas contra la leucemia” vivió este año su duodécima edición con el objetivo de concienciar a la población de la gran importancia que tiene la donación altruista de médula ósea, de sangre y de sangre del cordón umbilical para personas con enfermedades hematológicas.

La emoción después de completar el recorrido. | // GUSTAVO SANTOS

En torno a las 13 horas los primeros participantes entraban en la Boa Vila, conformando una auténtica marea de camisetas blancas y rojas, y demostrando su gran espíritu de superación e ilusión permanente. Junto a ellos, el presidente de la asociación, David Gil, no ocultaba su satisfacción al ver completado, un año más, el recorrido. “Con este evento pretendemos dar visibilidad a un tipo de donación en vida que se convierte en la única esperanza para muchas personas afectadas de leucemia o cualquier otra enfermedad de la sangre”, explicó. Se trata de un acto voluntario, pero trascendental para la vida de muchos pacientes, sobre todo, ante la elevada tasa de incompatibilidad de donantes registrada a nivel familiar. “En Galicia no llegamos a los 15.000 registros de un total de algo más de 430.000 contabilizados en España por la memoria de la REDMO 2020”, recordó el presidente del colectivo.

La “Marcha Solidaria 700 Camisetas contra la Leucemia” es una iniciativa que se inició en el año 2010 y simboliza la primera de las diez etapas que David Gil realizó en 2009 (entre Vigo y Pontevedra), en un recorrido para unir las siete principales ciudades de Galicia. Su meta, en aquel momento, fue la entrega de 700 camisetas, destinadas a las personas que a partir de ese momento formasen parte de los registros de donantes de médula ósea, formalizados en las siete grandes urbes de la comunidad. Fueron 500 kilómetros en diez días ininterrumpidos. De ahí surgió el movimiento en Facebook “700 camisetas contra la Leucemia” que a día de hoy siguen casi 18.480 personas en todo el mundo.