El juicio a 21 acusados de intentar descargar un alijo de 2.000 kilos de cocaína a bordo del remolcador Titán III en el año 2018, se centró ayer en la declaración del agente de Policía que dirigió el operativo de seguimiento. Este funcionario declaró durante toda la mañana, para responder a las preguntas del fiscal y de los abogados de los 21 imputados.

Relató las grabaciones de conversaciones telefónicas y las reuniones de algunos de los implicados, seguidas de cerca por agentes, en sus movimientos por villas y ciudades tanto de Galicia como del resto de España. Los funcionarios de Policía hicieron un seguimiento intensivo de los movimientos y de las conversaciones que mantenían los acusados.